SDN: un concepto de arquitectura de red evolutivo

Dado que el concepto es sumamente amplio y a veces divergente, quizá más que preguntarnos qué es una SDN nos deberíamos preguntar por qué necesitamos una SDN y pará qué. Si podemos dar respuesta a estas preguntas, tendremos una red que haga lo que necesitamos de ella, independientemente de la etiqueta que le pongamos.

Algo en lo que todos parecen estar de acuerdo es que venimos de un mundo de arquitecturas de red estáticas, muy vinculadas a los elementos físicos que las componen, poco flexibles en cuanto a posibilidades de adaptarse a los cambios y de sacar todo el partido a la inversión realizada en equipos de red, que se comportan desde un punto de vista tecnológico como compartimentos estancos, etc.

Esto ha servido hasta ahora, pero los cambios en los patrones de uso de la tecnología de los últimos años han hecho que este modelo de arquitecturas se haya quedado obsoleto, como en su día paso con los grandes “mainframes”. Además, ahora disponemos ya de la tecnología que permite hacer las cosas de otra manera.

Lo que se necesita hoy día es una red que se adapte dinámicamente al uso que se hace de ella en cada momento, no tan vinculada al equipamiento físico, de manera que se puedan manejar los recursos de red con flexibilidad; ágil y de respuesta rápida; con más capacidades de automatización y programación, para que no haya que estar reinventando la rueda constantemente, etc. Y como consecuencia de todo ello una red más eficiente, una arquitectura que sea sobre todo un pool de recursos que se asignan a cada servicio de forma flexible según las necesidades, y así sacar el máximo partido a la inversión realizada en la red.

Vale. Yo quiero que mi red haga todas estas cosas. ¿Como puedo conseguirlo? Las diferentes ofertas que hay en el mercado a día de hoy presentan ventajas e inconvenientes. Unas son muy completas, pero son soluciones propietarias que requieren instalar todo el equipamiento nuevo, de un único fabricante, e interfaces que se integran con dificultad con otras soluciones del mercado. Otras ofrecen interfaces abiertos, pero se centran mucho en la parte del plano de control, y han desarrollado poco el plano de aplicaciones, que son las que realmente aportan valor al negocio.

Planteamiento evolutivo

Pero, ¿es realmente necesario hacer tabla rasa de todo lo que tenemos instalado para implementar SDN? Creemos que no. Como he comentado, lo importante no es la etiqueta que le pongamos a nuestra red, sino saber que es lo que realmente necesitamos y conseguir que nuestra red lo haga. Creemos que lo sensato es un planteamiento evolutivo, que nos permita mejorar nuestra red, partiendo de lo que ya tenemos, hasta conseguir lo que necesitamos.

Quizá no nos hayamos dado cuenta de que muchas de las cosas que SDN proporciona puede que las tengamos ya disponibles en nuestra red o podamos incorporarlas con muy poca inversión. Si ya tenemos el equipamiento adecuado, puede que baste con mejorar simplemente la consola de gestión para ganar en flexibilidad y capacidades de programación y automatización de la red. Podemos definir y automatizar políticas que permitan aprovisionar automaticamente servicios o definir parámetros de rendimiento, prioridad o calidad de servicio para aplicaciones, usuarios o dispositivos, etc. Podemos hacer que nuestra red trabaje de forma conjunta y colaborativa con aplicaciones y soluciones de otros ámbitos (seguridad, virtualización de servidores, análisis de tráfico y caracterización de aplicaciones, etc.)

Esto es importante, porque cuando llegue el momento de renovar equipos de red, ya tendremos una estrategia definida sobre qué papel queremos que juegue nuestra infraestructura de comunicaciones, hacia donde queremos ir, y esto nos ayudará a acertar en nuestra inversión, apostando por soluciones abiertas y basadas en los estándares de mercado, que poco a poco se irán definiendo. Ello nos permitirá además aprovechar todo el desarrollo de aplicaciones que se está creando en torno a SDN e ir mejorando nuestra red hasta alcanzar lo que nuestro negocio necesita.