Cloud computing: seguridad y eficiencia

Cuando se presenta una tecnología nueva, por muy ‘revolucionaria’ que sea, lo normal es que pase un tiempo antes de que nos demos cuenta de su poder transformador. Primero nos limitamos a experimentar de qué forma puede agilizar o simplificar las tareas a las que ya estamos acostumbrados. Pero con el paso del tiempo empezamos a descubrir aplicaciones completamente nuevas. Así ha sucedido con Internet, que la empezamos a entender no sólo como un medio para mejorar las comunicaciones entre personas y empresas, sino también para transformar nuestra relación con la información.
Internet nos permite confiar a terceros aquella información que es más valiosa para nosotros como individuos o como empresas, de la misma forma que confiamos nuestros ahorros a los bancos. El disco duro de nuestro ordenador ya no es la caja fuerte en la que guardemos toda la información crítica para nuestra vida diaria. Archivamos nuestros e-mails y fotos en la red y la separación entre la información privada y la que hemos publicado en blogs y redes sociales comienza a desaparecer. Esta transformación ha sido posible gracias a cloud computing. Con este tipo de soluciones, el activo más preciado por el usuario deja de ser la capacidad de almacenamiento de su disco duro, ya que toda la información puede guardarse externamente. En cambio, crece en importancia la velocidad de transferencia, la fiabilidad y la seguridad de los datos.
Pero, ¿qué pasa en las empresas? El fenómeno de cloud computing ya ha transformado la experiencia que tienen de la informática los usuarios domésticos, de manera que ahora estos mismos usuarios son los que están tirando del carro y demandando los mismos servicios en el entorno empresarial. Sin embargo, migrar un sistema informático requiere una gran inversión de tiempo, y una migración fallida puede suponer un trastorno irreparable para el negocio. Muchos responsables de informática todavía son escépticos y se preguntan si realmente es seguro confiar todos sus datos críticos a cloud computing.
Desde luego, sería irresponsable que no se hiciesen estas preguntas. De todas formas, es cada vez más patente que la externalización de los datos, se haga como se haga, se trata de una tendencia imparable y de una necesidad para las empresas que busquen mejorar la productividad y la eficiencia del negocio; aún más en estos tiempos de recesión económica. Además, cloud computing ofrece unas garantías de fiabilidad que no se pueden obtener si se almacenan todos los datos internamente en los servidores de las empresas. Es, por tanto, la responsabilidad de los operadores TIC persuadir a las empresas de los beneficios de esta tecnología.
Actualmente, los centros de datos sólo aprovechan entre el 15% y el 20% de la capacidad de los servidores alojados en ellos y se prevé que en los próximos cinco años el consumo energético de dichos centros represente el 50% de los costes. El modelo de cloud computing permite aprovechar mucho mejor esta capacidad, de manera que las empresas sólo pagan por los servicios que consumen, un precio que varía en función de factores como la estacionalidad. De esta forma, las empresas estarán en posición de esperar un nivel de servicio que responda a la demanda real.
Ante todo, las empresas buscan una relación de máxima confianza con las empresas que se encargan de almacenar y gestionar sus datos críticos. Cloud computing les ofrece numerosas ventajas a nivel de seguridad, eficiencia, y flexibilidad. La información está a disposición de cualquier empleado autorizado, desde cualquier lugar y a través de cualquier dispositivo, y los usuarios tienen la seguridad de que sus recursos más valiosos están en manos de los expertos. Es inevitable que en los próximos años cloud computing revolucione la informática de las empresas de la misma forma que ha transformado la informática de gran consumo, siempre que las operadoras incorporemos esta tecnología de forma gradual, de manera que los usuarios sepan que cuentan con el mismo nivel de fiabilidad y de seguridad con el que siempre nos han identificado.


Javier González
Director de la Unidad de Negocio de Major de COLT Telecom