La Nube (The Cloud)
¿Es para mi empresa?
En el anterior especial que hicimos, titulé mi editorial Cambio de paradigma: de las TIC a las CIT. En ella reflexionaba sobre una tendencia que obliga a cambiar el foco de la gestión de las TIC: hacia los Clientes Intensivos en Tecnología. Este año quiero introducir la reflexión sobre otro de los aspectos que están transformando la demanda del cliente interno y la gestión del CIO: The Cloud (la nube).
En los últimos 24 meses, todo se ha teñido, de un modo u otro, de “nube”. Los fabricantes de equipos, las empresas como Microsoft, Google o Amazon, los consultores y los medios insisten en que la nube ya ha llegado y lo ha hecho para quedarse. Al mismo tiempo, muchos CIOs no ven cómo se puede “ceder” a la nube los datos, procesos y aplicaciones de su negocio, sin perder control y capacidad de gestión.
Desde la atalaya que nos da trabajar con tantos clientes de tan diversos sectores así como con los fabricantes de hardware y software líderes del mundo, podemos afirmar que efectivamente la nube está aquí para quedarse. Sin embargo, más que simplificar, este fenómeno va a introducir un grado mayor de complejidad de gestión. Tomar las decisiones correctas y, sobre todo, gestionar el modelo mixto, supondrán uno de los retos que diferenciarán a los mejores de los peores directores de TI.
Dos grupos de factores contrapuestos indican que éste será (¡es ya!) uno de los retos de los CIOs.
Las inversiones realizadas hasta la fecha, los recursos humanos de que se dispone y la costumbre de ‘tener a mano’ personas e infraestructuras son algunos de los factores que limitan la evolución. Además, tecnologías que permiten la virtualización, la movilidad, etc. ayudan a evolucionar sin necesidad de saltar a la nube. Los interrogantes sobre cómo gestionar la nube o cómo integrar los estándares corporativos introducen incertidumbres adicionales. Por otro lado, la creciente y persistente presión por la reducción de costes, la eficiencia y ubicuidad de la “nube” o la presión mediática, obligan a plantearse esta opción. La creciente oferta de soluciones, la experiencia con el hosting, la necesidad de reducir el número de expertos en plantilla o los problemas laborales y legales de la cesión de personal añaden presión en esta dirección.
Las experiencias mixtas con el outsourcing masivo y la necesidad de mantener integradas las soluciones, acrecientan los interrogantes de cómo y cuándo dar el paso.
En este entorno, el reto será encontrar aquellos proveedores de TI que nos acompañen en el análisis de oportunidades y riesgos, que nos ayuden a definir e implantar una solución mixta y evolutiva, y que nos complementen en la gestión extremo-a-extremo, 24x7 de los servicios y soluciones de TI de manera transparente, segura y adecuada a los procesos de negocio.
Manuel Nó, Consejero Delegado de Unitronics.
En los últimos 24 meses, todo se ha teñido, de un modo u otro, de “nube”. Los fabricantes de equipos, las empresas como Microsoft, Google o Amazon, los consultores y los medios insisten en que la nube ya ha llegado y lo ha hecho para quedarse. Al mismo tiempo, muchos CIOs no ven cómo se puede “ceder” a la nube los datos, procesos y aplicaciones de su negocio, sin perder control y capacidad de gestión.
Desde la atalaya que nos da trabajar con tantos clientes de tan diversos sectores así como con los fabricantes de hardware y software líderes del mundo, podemos afirmar que efectivamente la nube está aquí para quedarse. Sin embargo, más que simplificar, este fenómeno va a introducir un grado mayor de complejidad de gestión. Tomar las decisiones correctas y, sobre todo, gestionar el modelo mixto, supondrán uno de los retos que diferenciarán a los mejores de los peores directores de TI.
Dos grupos de factores contrapuestos indican que éste será (¡es ya!) uno de los retos de los CIOs.
Las inversiones realizadas hasta la fecha, los recursos humanos de que se dispone y la costumbre de ‘tener a mano’ personas e infraestructuras son algunos de los factores que limitan la evolución. Además, tecnologías que permiten la virtualización, la movilidad, etc. ayudan a evolucionar sin necesidad de saltar a la nube. Los interrogantes sobre cómo gestionar la nube o cómo integrar los estándares corporativos introducen incertidumbres adicionales. Por otro lado, la creciente y persistente presión por la reducción de costes, la eficiencia y ubicuidad de la “nube” o la presión mediática, obligan a plantearse esta opción. La creciente oferta de soluciones, la experiencia con el hosting, la necesidad de reducir el número de expertos en plantilla o los problemas laborales y legales de la cesión de personal añaden presión en esta dirección.
Las experiencias mixtas con el outsourcing masivo y la necesidad de mantener integradas las soluciones, acrecientan los interrogantes de cómo y cuándo dar el paso.
En este entorno, el reto será encontrar aquellos proveedores de TI que nos acompañen en el análisis de oportunidades y riesgos, que nos ayuden a definir e implantar una solución mixta y evolutiva, y que nos complementen en la gestión extremo-a-extremo, 24x7 de los servicios y soluciones de TI de manera transparente, segura y adecuada a los procesos de negocio.
Manuel Nó, Consejero Delegado de Unitronics.
