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Las herramientas de IA generativa se cuelan en las organizaciones sin aprobación previa

El 61% de los trabajadores españoles afirma haber utilizado herramientas de inteligencia artificial generativa que no están formalmente autorizadas por la compañía, según un informe de Salesforce.

Inteligencia Artificial usuario

A pesar de las promesas que brinda la inteligencia artificial (IA) generativa en el entorno laboral, la falta de políticas claramente definidas en torno a su utilización puede estar poniendo en jaque a las empresas. Así se desprende del último informe impulsado por Salesforce. Bajo el título Las promesas y dificultades de la IA generativa en el trabajo, la compañía recoge el punto de vista de más de 14.000 trabajadores de 14 países diferentes entre los que se incluye España. En este sentido cabe destacar que a medida que se populariza el uso de la IA generativa entre los trabajadores y las empresas comienzan a integrarlas en sus flujos de trabajo, cuestiones como la gobernanza y la regulación han pasado a ocupar un primer plano.

Los datos revelan que el número de usuarios de IA generativa crece exponencialmente en el lugar de trabajo, sin embargo, se está utilizando la tecnología sin formación, orientación o aprobación por parte de su empresa. Según el estudio, las políticas y la formación de las empresas en torno a la IA generativa no están claramente definidas y, en el mejor de los casos, son ambiguas. Al mismo tiempo, los trabajadores reconocen la importancia de esta tecnología para avanzar en su propia carrera. Esto plantea un interrogante a las compañías: ¿cómo equilibrar las promesas profesionales de la IA generativa con los riesgos de utilizarla sin orientación, formación o políticas claramente definidas?

 

Entran en el lugar de trabajo sin supervisión

Globalmente, el 28% de los trabajadores utilizan actualmente la IA generativa en el trabajo; gran parte de ellos lo hacen, además, sin la aprobación formal de sus empresas. Otro 32% espera utilizar pronto la IA generativa en el trabajo, por lo que es importante que las empresas establezcan políticas claras. En el caso de España es el 22% de los trabajadores quien la emplea, además, el 74% de los usuarios afirma que los hace más productivos.

Sin embargo, aunque más de la mitad de los trabajadores (55%) han utilizado herramientas de IA generativa no aprobadas en el trabajo y el 40% ha utilizado herramientas que su empresa ha prohibido expresamente, reconocen que el uso de programas aprobados por la empresa es la mejor forma de garantizar el uso ético y seguro de la tecnología. En el caso de España estas cifras son más altas y llegan hasta el 61% que afirma haber utilizado herramientas de IA generativa que no están formalmente aprobadas por su empresa siendo el 33% de los encuestados españoles los que han utilizado herramientas de IA generativa que su empresa ha prohibido.

El informe también ha revelado que los usuarios realizan otras actividades éticamente cuestionables. Por ejemplo, haciendo pasar la IA por su propio trabajo o inflando sus habilidades. Así, en España, el 66% de los trabajadores españoles ha pasado trabajo de IA generativa como propio (64% es la media global) y el 36% consideraría inflar sus habilidades en IA generativa para asegurarse una oportunidad laboral, frente al 41% de media global.

Pero, la responsabilidad no recae enteramente en los trabajadores. El 73% de los empleados españoles no ha recibido ni completado formación sobre IA generativa en sus empresas (69% a nivel global). Este porcentaje llega al 74% cuando se les pregunta por formación sobre cómo utilizar la IA generativa de forma ética (71% de media global) y el 71% sobre cómo utilizar la IA generativa de forma segura en el puesto de trabajo (69% a escala global).  

 

Políticas ambiguas o inexistentes

Los encuestados en el informe no solo informan de la falta de formación, sino que señalan que las políticas acerca de IA generativa de sus empresas no están claramente definidas o, directamente no existen. En el caso español, el 84% de los trabajadores afirma que su empresa no tiene políticas claramente definidas sobre el uso de la IA generativa en el trabajo. Además, casi la mitad (46%) de los trabajadores españoles cuya empresa sí cuenta con políticas sobre IA generativa afirma que su organización no tiene una opinión firme sobre el uso de la tecnología en el puesto de trabajo. Una pasividad que puede impactar negativamente en el negocio.

 

La orientación es clave

Utilicen o no IA generativa en el lugar de trabajo, los trabajadores reconocen el impacto de la tecnología en sus carreras. Así, el 47% de los trabajadores en España cree que dominar la IA generativa les haría ser más demandados en su puesto de trabajo. Por otro lado, el 52% cree que daría lugar a una mayor satisfacción laboral y el 38% afirma que implicaría un mayor salario que aquellos que no dominan la tecnología. Siguiendo esta misma línea, el 39% de ellos considera que el dominio de la IA generativa podría implicar una promoción o progreso en su trabajo.

La IA generativa también actúa como elemento de atracción y retención de talento. De hecho, el 44% de los trabajadores españoles afirma que se sentiría más atraído por una empresa proactiva y avanzada con IA generativa al tiempo que el 56% de los usuarios en España defiende que la IA generativa les hace estar más comprometidos en su puesto trabajo. Según los datos de este informe, el 86% de los trabajadores españoles considera que actualmente existen barreras para utilizar la IA generativa en el trabajo, por lo que la orientación resulta crucial.



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