Los nuevos retos de la optimización WAN
El aumento imparable del tráfico corporativo, la tendencia a la distribución geográfica en sucursales al tiempo que se consolidan los recursos TI, la adopción cada vez mayor de nuevas aplicaciones de voz y vídeo IP, y la penetración imparable en las organizaciones de los nuevos modelos de operación que impone la movilidad y el cloud computing hacen de la WAN uno de los elementos clave sobre los que se sustenta hoy los negocios. Una WAN que no esté preparada para dar soporte a la demanda continua de ancho de banda y optimización del rendimiento que todos estos factores provoca acabará suponiendo, más pronto que tarde, una barrera a la productividad y al crecimiento corporativo.
No es un problema nuevo, desde luego. El crecimiento del tráfico es una tendencia que se viene manifestando desde décadas según mejoran las velocidades de transmisión y gana complejidad la naturaleza de las aplicaciones, pero sí es hoy cuando el rol de la WAN en el negocio se vuelve más crítico ante los nuevos modelos de suministro y operación de las aplicaciones y los recursos TI. Por ello, las herramientas de optimización WAN son en la actualidad más necesarias que nunca. Demostrado en el pasado que la simple provisión de más ancho de banda no es siempre la respuesta ni más adecuada ni más económica, la optimización WAN se impone como la solución idónea para mejorar significativamente el rendimiento y los tiempos de respuesta de la red y las aplicaciones mediante diversas técnicas que permiten eliminar las transmisiones redundantes, comprimir y priorizar los datos y reducir el volumen de los protocolos de comunicación. En consecuencia, estas soluciones ayuda a reducir los costes operativos y los de hardware, software y ancho de banda, mejoran la productividad y optimizan el negocio.
Con las técnicas de optimización WAN se consigue una más rápida accesibilidad a los ficheros, una mayor velocidad entre las múltiples sedes de la organización y un rendimiento mejorado de las aplicaciones en general, incluidas las sensibles a los retardos. Asimismo, mejora la recuperación de datos haciéndola más rápida y fiable. Gartner, en su ‘Cuadrante Mágico de Controladores de Optimización WAN’ de diciembre de 2010, define estas herramientas como la mejora del rendimiento de las aplicaciones de negocio sobre conexiones WAN.
Como describe la firma consultora, la mayoría de las redes transportan una variedad de tipos de tráfico con diferentes características e importancia, y muchas organizaciones se esfuerzan en gestionar ese tráfico para optimizar los tiempos de respuesta de las aplicaciones críticas y reducir los costes dado que el ancho de banda sigue representando una parte importante del gasto operativo de las redes de área amplia. “Pero el coste del ancho de banda no es el único factor a considerar; alinear la asignación de recursos WAN con las necesidades del negocio también es importante. Y como los recursos cada vez están más centralizados, minimizar el efecto de la latencia sobre los tiempos de respuesta de una aplicación se está convirtiendo en un requisito crítico. Además, la virtualización y los nuevos entornos de aplicaciones como cloud computing y lo servicios web pueden ejercer una inesperada presión a la red”.
Según Gartner, diferentes tipos de tráfico y arquitecturas TI presentan dificultades y oportunidades para mejorar los tiempos de respuesta de las aplicaciones esenciales. Por ejemplo, el tráfico que no es sensible al tiempo, como el backup o el acceso personal a la web, puede empantanar los enlaces WAN generando tiempos de respuesta lentos para las aplicaciones de negocio críticas. Asimismo, aplicaciones como SharePoint, que hacen un uso intensivo de contenido dinámico, también pueden sobrecargar los enlaces WAN, y la centralización global de los centros de datos y servidores de sucursales pueden exponer protocolos sensibles a la latencia. Igualmente, las transferencias de archivos o la entrega de vídeos pueden saturar la capacidad de la WAN.
Algunas firmas consultoras cifran en entre un 40 y un 80% el número de enlaces WAN que pueden llegar a eliminarse gracias a técnicas de optimización como compresión y caching. “Ha existido una etapa en la que parecía que cualquier incidencia se solucionaba añadiendo ancho de banda. Ahora sabemos que hay una gran variedad de factores que afectan al rendimiento de las aplicaciones sobre redes WAN que necesitan otro tipo de respuesta. Hay protocolos, por ejemplo, que no fueron diseñados para soportar un entorno WAN y que las empresas necesitan utilizar”, afirma Raul Flores, Field System Engineer de F5 Networks. Para solucionar este reto, “basta con incorporar soluciones especialmente diseñadas para optimizar las redes de banda ancha. Soluciones que mejoren el rendimiento de las aplicaciones, que eliminen los problemas a la hora de escalar la infraestructura de aplicaciones web; soluciones que reduzcan las peticiones de ayuda al servicio de soporte TI y que sean capaces de gestionar apropiadamente el tráfico de datos, de forma óptima y segura entre data centers. Básicamente se siguen pidiendo soluciones que incrementan el rendimiento y que contengan los costes. En este sentido, las técnicas más comunes de aceleración son mejoras a nivel TCP, compresión avanzada, deduplicación a nivel de byte, caching y optimización de ciertos protocolos a nivel 7, como http, ftp, cifs, email… La solución que propone F5 combina todas estas técnicas”.
Un mercado en crecimiento
El alto nivel de prestaciones de las soluciones de optimización WAN explica la buena evolución de este mercado. Según Nigel Hawthorn, vicepresidente de marketing para EMEA de Blue Coat, “la inversión de las empresas en la optimización de sus redes no ha dejado de crecer, al ritmo que lo hace el tráfico que soportan. Con el aumento de las necesidades debido a los nuevos formatos de vídeo, voz, telefonía IP y aplicaciones empresariales es previsible que la inversión siga aumentando Según datos de la consultora IDC, el mercado de distribución de aplicaciones WA
