QoS en la empresa: ¿calidad o cantidad?
No siempre implementar técnicas de calidad de servicio (QoS) es necesario, pero incluso cuando lo es las empresas se muestran reacias por la complejidad que implican. Por ello, simplificarla es ahora uno de los principales objetivos de los fabricantes para impulsar su adopción. De lo contrario, añadir más ancho de banda podría seguir siendo la alternativa preferida.
Desde hace años se viene hablando de las ventajas de la calidad de servicio (QoS) en las LAN, pero algunos expertos advierten de que, a menos que se esté trabajando con voz, vídeo u otras aplicaciones sensibles a los retardos, para eliminar las situaciones de congestión basta con añadir más ancho de banda. Después de todo, según IDC, el precio medio mundial de un puerto de conmutador Gigabit Ethernet es de 531 dólares –bastante menos en muchos casos– y seguirá bajando en el futuro próximo hasta alcanzar niveles inferiores a 200 dólares hacia 2006.
Tales precios resultan cada vez más abordables por las empresas con presupuestos ajustados, especialmente si dotarse de más ancho de banda significa no tener que aprender todo lo relacionado con las tecnologías QoS subyacentes, como 802.1P, 802.1Q, Differentiated Services y Type of Service. Como advierte Gartner, quizá lo único que justifique introducirse en el intrincado mundo de la calidad de servicio a nivel de la LAN sean los despliegues de VoIP. Y aún incluso en estos casos podría eludirse si no es crucial que las llamadas tengan siempre una elevada calidad.
Simplificando la configuración
Para aumentar el atractivo de QoS entre las empresas, fabricantes como 3Com, Cisco y Alcatel incluyen esta tecnología en sus conmutadores LAN sin coste adicional. Además, están desarrollando software de gestión QoS que, por un precio adicional, simplifica la configuración de la calidad de servicio al permitir realizarla a escala global para todos los puertos de conmutador implicados, sin necesidad de configurar los equipos uno a uno. Sólo es preciso establecer los parámetros QoS deseados mediante una interfaz gráfica.
Alcatel acaba de lanzar la nueva plataforma de software Policy View para OneTouch que, entre otras características, automatiza la tarea de establecer manualmente los parámetros QoS para la telefonía IP. Para ello, el software elige automáticamente el método más simple de suministrar la mejor calidad de servicio posible, tomando en consideración las capacidades de los conmutadores implicados, sin que los usuarios tengan que preocuparse de la tecnología subyacente.
De la misma categoría se pueden considerar Cluster Management Suite de Cisco Systems, NetSight Policy Manager de Enterasys Networks o los asistentes de configuración incluidos en Optivity Policy Server de Nortel Networks. Estos y otros gestores de políticas disponibles hoy en el mercado se ocupan de establecer los parámetros de control de QoS, como direcciones fuente y destino, protocolo, UDP (User Datagram Protocol) o número de puerto TCP, ID de VLAN e incluso limitación de la velocidad según el momento del día. Seguro que cualquier usuario medio lo agradecerá.
Nuevos frentes
En estos momentos, la mayor parte de los principales fabricantes proporcionan muy buenas soluciones para controlar la calidad de servicio, y no sólo para soportar VoIP. Muchas empresas saben por propia experiencia que los usuarios finales acabarán encontrando el modo de devorar buena parte, cuando no todo, el ancho de banda disponible, no importa cuánto sea. Así, es muy posible que acabe imponiéndose la necesidad de priorizar el ancho de banda ya sea en función del usuario, momento del día o volumen, ya sea por la combinación de todos estos factores.
User Personalized Networking de Enterasys, por ejemplo, crea un perfil QoS para cada usuario que recoge los derechos que se le han asignado, con independencia del dispositivo de acceso a la red que utilicen. Y otros fabricantes están preparando ya soluciones similares incluso para entornos de networking inalámbrico. Es el caso de Nortel, que trabaja con el objetivo de que los usuarios que accedan a la red corporativa a través de una red inalámbrica pública puedan obtener los mismos niveles de prioridad de los que disponen en la LAN.
Con todo, a pesar de la existencia de estándares QoS cada fabricante los implanta de un modo diferente, por lo que no es aconsejable implementar entornos multimarca. Lo dice la consultora Gartner, que incluso se atreve a denunciar el poco interés manifestado por los fabricantes por lograr una auténtica interoperatividad. Es cierto que, en un esfuerzo cooperativo, un buen número de fabricantes creó en 1999 el QoS Forum, con el objetivo de “educar al mercado y facilitar el despliegue de productos y servicios capacitados para QoS”, pero una simple visita a www.qosforum.com nos dará idea de la poca actividad generada hasta el momento. Los avances en interoperatividad tendrán que venir de otras iniciativas.
Definición de QoS
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Las tecnologías de calidad de servicio (QoS) hacen lo que el ancho de banda en bruto o las técnicas de compresión de datos no pueden: garantizar la entrega oportuna de recursos o datos de una aplicación específica a uno o varios destinos determinados.
Ventajas
- Garantiza el ancho de banda a usuarios y aplicaciones clave.
- Puede eliminar la necesidad de adoptar infraestructuras de red más rápidas.
- Puede ayudar a planificar la red midiendo y gestionando el flujo del tráfico.
Desventajas
- Se han de utilizar paquetes de software de gestión para evitar la complejidad inherente a las configuraciones.
- Las implementaciones pueden requerir el cambio de algunos de los equipos más viejos.
- Puede crear problemas sobre quién ha de disfrutar de las mejores condiciones QoS y quién controla las asignaciones de derechos.
Mecanismos QoS
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Los fabricantes ofrecen QoS mediante el soporte de distintas tecnologías, como:
IEEE 802.1P y 802.1Q
- Soporta calidad de servicio a Nivel 2.
- 802.1P ofrece ocho clases de tráfico marcadas en los campos de prioridad de las etiquetas VLAN 802.1Q
Differentiated Services
- Soporta calidad de servicio a Nivel 3.
- Ofrece hasta 64 prioridades de servicios.
Type of Service
- Soporta calidad de servicio a Nivel 3
- Aporta ocho niveles de prioridad.
Desde hace años se viene hablando de las ventajas de la calidad de servicio (QoS) en las LAN, pero algunos expertos advierten de que, a menos que se esté trabajando con voz, vídeo u otras aplicaciones sensibles a los retardos, para eliminar las situaciones de congestión basta con añadir más ancho de banda. Después de todo, según IDC, el precio medio mundial de un puerto de conmutador Gigabit Ethernet es de 531 dólares –bastante menos en muchos casos– y seguirá bajando en el futuro próximo hasta alcanzar niveles inferiores a 200 dólares hacia 2006.
Tales precios resultan cada vez más abordables por las empresas con presupuestos ajustados, especialmente si dotarse de más ancho de banda significa no tener que aprender todo lo relacionado con las tecnologías QoS subyacentes, como 802.1P, 802.1Q, Differentiated Services y Type of Service. Como advierte Gartner, quizá lo único que justifique introducirse en el intrincado mundo de la calidad de servicio a nivel de la LAN sean los despliegues de VoIP. Y aún incluso en estos casos podría eludirse si no es crucial que las llamadas tengan siempre una elevada calidad.
Simplificando la configuración
Para aumentar el atractivo de QoS entre las empresas, fabricantes como 3Com, Cisco y Alcatel incluyen esta tecnología en sus conmutadores LAN sin coste adicional. Además, están desarrollando software de gestión QoS que, por un precio adicional, simplifica la configuración de la calidad de servicio al permitir realizarla a escala global para todos los puertos de conmutador implicados, sin necesidad de configurar los equipos uno a uno. Sólo es preciso establecer los parámetros QoS deseados mediante una interfaz gráfica.
Alcatel acaba de lanzar la nueva plataforma de software Policy View para OneTouch que, entre otras características, automatiza la tarea de establecer manualmente los parámetros QoS para la telefonía IP. Para ello, el software elige automáticamente el método más simple de suministrar la mejor calidad de servicio posible, tomando en consideración las capacidades de los conmutadores implicados, sin que los usuarios tengan que preocuparse de la tecnología subyacente.
De la misma categoría se pueden considerar Cluster Management Suite de Cisco Systems, NetSight Policy Manager de Enterasys Networks o los asistentes de configuración incluidos en Optivity Policy Server de Nortel Networks. Estos y otros gestores de políticas disponibles hoy en el mercado se ocupan de establecer los parámetros de control de QoS, como direcciones fuente y destino, protocolo, UDP (User Datagram Protocol) o número de puerto TCP, ID de VLAN e incluso limitación de la velocidad según el momento del día. Seguro que cualquier usuario medio lo agradecerá.
Nuevos frentes
En estos momentos, la mayor parte de los principales fabricantes proporcionan muy buenas soluciones para controlar la calidad de servicio, y no sólo para soportar VoIP. Muchas empresas saben por propia experiencia que los usuarios finales acabarán encontrando el modo de devorar buena parte, cuando no todo, el ancho de banda disponible, no importa cuánto sea. Así, es muy posible que acabe imponiéndose la necesidad de priorizar el ancho de banda ya sea en función del usuario, momento del día o volumen, ya sea por la combinación de todos estos factores.
User Personalized Networking de Enterasys, por ejemplo, crea un perfil QoS para cada usuario que recoge los derechos que se le han asignado, con independencia del dispositivo de acceso a la red que utilicen. Y otros fabricantes están preparando ya soluciones similares incluso para entornos de networking inalámbrico. Es el caso de Nortel, que trabaja con el objetivo de que los usuarios que accedan a la red corporativa a través de una red inalámbrica pública puedan obtener los mismos niveles de prioridad de los que disponen en la LAN.
Con todo, a pesar de la existencia de estándares QoS cada fabricante los implanta de un modo diferente, por lo que no es aconsejable implementar entornos multimarca. Lo dice la consultora Gartner, que incluso se atreve a denunciar el poco interés manifestado por los fabricantes por lograr una auténtica interoperatividad. Es cierto que, en un esfuerzo cooperativo, un buen número de fabricantes creó en 1999 el QoS Forum, con el objetivo de “educar al mercado y facilitar el despliegue de productos y servicios capacitados para QoS”, pero una simple visita a www.qosforum.com nos dará idea de la poca actividad generada hasta el momento. Los avances en interoperatividad tendrán que venir de otras iniciativas.
Definición de QoS
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Las tecnologías de calidad de servicio (QoS) hacen lo que el ancho de banda en bruto o las técnicas de compresión de datos no pueden: garantizar la entrega oportuna de recursos o datos de una aplicación específica a uno o varios destinos determinados.
Ventajas
- Garantiza el ancho de banda a usuarios y aplicaciones clave.
- Puede eliminar la necesidad de adoptar infraestructuras de red más rápidas.
- Puede ayudar a planificar la red midiendo y gestionando el flujo del tráfico.
Desventajas
- Se han de utilizar paquetes de software de gestión para evitar la complejidad inherente a las configuraciones.
- Las implementaciones pueden requerir el cambio de algunos de los equipos más viejos.
- Puede crear problemas sobre quién ha de disfrutar de las mejores condiciones QoS y quién controla las asignaciones de derechos.
Mecanismos QoS
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Los fabricantes ofrecen QoS mediante el soporte de distintas tecnologías, como:
IEEE 802.1P y 802.1Q
- Soporta calidad de servicio a Nivel 2.
- 802.1P ofrece ocho clases de tráfico marcadas en los campos de prioridad de las etiquetas VLAN 802.1Q
Differentiated Services
- Soporta calidad de servicio a Nivel 3.
- Ofrece hasta 64 prioridades de servicios.
Type of Service
- Soporta calidad de servicio a Nivel 3
- Aporta ocho niveles de prioridad.
