Detectado el primer virus para teléfonos móviles de propagación masiva
Pese a que se habían identificado varios virus diseñados para teléfonos móviles, por lo que las diferentes compañías de seguridad han empezado a alertar a todos los usuarios (especialmente a aquellos que posean los denominados teléfonos inteligentes o smartphone) para que extremaran sus precauciones, lo cierto es que no había constancia de una propagación masiva. Hasta ahora.
Un virus para teléfonos móviles ha conseguido lo que anteriores gusanos no: alcanzar una propagación “masiva”, al haber llegado a una compañía y propagarse entre los diferentes terminales de sus empleados, según ha informado la compañía F-Secure.
Es la primera vez que esta empresa constata que un virus para móviles crea algún quebradero de cabeza importante en una empresa, tal y como reconoce uno de sus investigadores, Ero Carrera. Esta plaga duró, según los datos facilitados, un día, en el que docenas de empleados recibieron el virus, que fue abierto por unos 20 empleados. Esto provocó la propagación del programa maligno. Sin embargo, no ha sido identificada la empresa víctima ni el país en el que opera.
Commwarrior.B es el nombre de este virus y se muestra como un documento adjunto en un mensaje multimedia (MMS), aunque también se puede propagar por Bluetooth. En el MMS, se le pide al usuario que abra el archivo adjunto, mientras que si le ha llegado por Bluetooth, se le pregunta si acepta el archivo recibido y ejecutarlo.
“Mucha gente puede pensar que es simplemente una broma o chiste, porque los virus aún no son comunes en la telefonía móvil”, declara Carera, quien cree que la gente aún no está concienciada como en la informática.
En este caso, y aunque el virus no causaba ningún daño a los teléfonos, la propagación del virus se detuvo cuando los empleados se empezaron a percatar de lo que estaba ocurriendo y dejaron de abrir el documento, según las explicaciones de Carrera.
Es la primera vez que esta empresa constata que un virus para móviles crea algún quebradero de cabeza importante en una empresa, tal y como reconoce uno de sus investigadores, Ero Carrera. Esta plaga duró, según los datos facilitados, un día, en el que docenas de empleados recibieron el virus, que fue abierto por unos 20 empleados. Esto provocó la propagación del programa maligno. Sin embargo, no ha sido identificada la empresa víctima ni el país en el que opera.
Commwarrior.B es el nombre de este virus y se muestra como un documento adjunto en un mensaje multimedia (MMS), aunque también se puede propagar por Bluetooth. En el MMS, se le pide al usuario que abra el archivo adjunto, mientras que si le ha llegado por Bluetooth, se le pregunta si acepta el archivo recibido y ejecutarlo.
“Mucha gente puede pensar que es simplemente una broma o chiste, porque los virus aún no son comunes en la telefonía móvil”, declara Carera, quien cree que la gente aún no está concienciada como en la informática.
En este caso, y aunque el virus no causaba ningún daño a los teléfonos, la propagación del virus se detuvo cuando los empleados se empezaron a percatar de lo que estaba ocurriendo y dejaron de abrir el documento, según las explicaciones de Carrera.
