Concert, al borde del colapso
Concert Communications, la empresa conjunta de AT&T y British Telecommunications para el negocio internacional, está al borde del fracaso. Equipos de ambos socios en esta alianza están manteniendo conversaciones en un intento de sacar a flote la iniciativa, según informaciones publicadas en Financial Times.
AT&T continúa manteniendo su compromiso con Concert, aunque, según sus responsables, el proyecto correría mejor suerte si comenzara a desarrollar su negocio europeo de forma independiente. De esta forma, se perfila como una de las alternativas el que la operadora estadounidense se hiciera con el control mayoritario de la sociedad, actualmente participada a partes iguales por los dos operadores.
Uno de los principales puntos de fricción entre los socios es el fracaso de Concert en la consecución de sus planes de ventas en Europa, del que sería en parte responsable, según la publicación, la falta de soporte facilitado por las unidades participadas por BT fuera del Reino Unido.
Otro problema para el entendimiento residiría en el compromiso de AT&T con NTT DoCoMo. Recientemente, la compañía japonesa anunció que tomaría un 16% de AT&T Wireless, a pesar de que la multinacional estadounidense y BT poseen una participación conjunta del 15% en Japan Telecom, en la que se integra J-Phone Communications, principal competidor de DoCoMo. De hecho, la semana pasada un periódico japonés informaba sobre la intención de AT&T de deshacerse de todas sus acciones en Japan Telecom.
Concert fue creada en julio de 1998, como el último eslabón en la cadena de alianzas que las operadoras de telecomunicaciones estaban creando para atacar los mercados internacionales, especialmente el segmento de grandes clientes corporativos. Y quizá sea también el último eslabón en romperse. Con anterioridad a su renacimiento en 1998 había sido el nombre de la alianza internacional de British Telecom con MCI Communications. Tras romperse esta relación se produjo la entrada de AT&T.
Otra alianza de este tipo, Unisource, se constituyó en 1992 con la participación de la holandesa KPN Telecom y la sueca Telia. A ella se sumaron más tarde otros socios, como la suiza Swisscom y Telefónica. El cese definitivo de sus operaciones se produjo en diciembre de 1999 con la venta del último activo de la alianza, el operador móvil alemán D-Plus, a MobilCom.
El tercero de estos grandes matrimonios, Global One, nació como una empresa conjunta entre Deutsche Telekom, Sprint y France Telecom, pero la alianza, como tal, se disolvió en octubre de 1999 y France Telecom tomó el mando.
www.concert.com
Uno de los principales puntos de fricción entre los socios es el fracaso de Concert en la consecución de sus planes de ventas en Europa, del que sería en parte responsable, según la publicación, la falta de soporte facilitado por las unidades participadas por BT fuera del Reino Unido.
Otro problema para el entendimiento residiría en el compromiso de AT&T con NTT DoCoMo. Recientemente, la compañía japonesa anunció que tomaría un 16% de AT&T Wireless, a pesar de que la multinacional estadounidense y BT poseen una participación conjunta del 15% en Japan Telecom, en la que se integra J-Phone Communications, principal competidor de DoCoMo. De hecho, la semana pasada un periódico japonés informaba sobre la intención de AT&T de deshacerse de todas sus acciones en Japan Telecom.
Concert fue creada en julio de 1998, como el último eslabón en la cadena de alianzas que las operadoras de telecomunicaciones estaban creando para atacar los mercados internacionales, especialmente el segmento de grandes clientes corporativos. Y quizá sea también el último eslabón en romperse. Con anterioridad a su renacimiento en 1998 había sido el nombre de la alianza internacional de British Telecom con MCI Communications. Tras romperse esta relación se produjo la entrada de AT&T.
Otra alianza de este tipo, Unisource, se constituyó en 1992 con la participación de la holandesa KPN Telecom y la sueca Telia. A ella se sumaron más tarde otros socios, como la suiza Swisscom y Telefónica. El cese definitivo de sus operaciones se produjo en diciembre de 1999 con la venta del último activo de la alianza, el operador móvil alemán D-Plus, a MobilCom.
El tercero de estos grandes matrimonios, Global One, nació como una empresa conjunta entre Deutsche Telekom, Sprint y France Telecom, pero la alianza, como tal, se disolvió en octubre de 1999 y France Telecom tomó el mando.
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