Negocios Inteligentes
La inteligencia de negocio (Business Intelligence-BI) aporta herramientas fundamentales para las funciones de control de gestión, y permite consolidar información relevante en la toma de decisiones dentro de grandes corporaciones y grupos de empresas. Especialmente útiles en entornos distribuidos, los sistemas BI apoyan la planificación, control y diagnóstico, ofreciendo una perspectiva integral de la empresa y permitiendo al mismo tiempo el conocimiento del mercado y de los clientes. En resumen, utilizando bien estas herramientas, las organizaciones pueden obtener ventajas competitivas en todos los ámbitos: gestión empresarial, gestión comercial y gestión de operaciones.
Pero en el entorno económico actual, los enfoques de BI tradicionales ya no son suficientes. El continuo aumento de la competencia en los mercados globales ha hecho que, en la mayoría de los casos, ya no sea suficiente con mejorar factores como la eficiencia operativa o la reducción de costes. En adelante, resultará imprescindible además, que las empresas sean capaces de diferenciarse por su capacidad de atraer y retener clientes, y por tanto, la BI diseñada para este fin irá cobrando una creciente relevancia en el mercado.
De cualquier modo, aunque la mayoría de las organizaciones reconoce ya como una necesidad crítica el desarrollo de proyectos de Business Intelligence en uno u otro sentido, el camino no deja de estar plagado de dificultades. En primer lugar, nunca en ningún otro ámbito se ha hecho más patente la necesidad de alinear las TI y el negocio. Se hace además imprescindible contar con soluciones flexibles y escalables que se adapten al enfoque vivo y continuado que la BI requiere para ajustarse al dinamismo actual de los negocios, el cual convierte en imprevisibles y siempre cambiantes las necesidades de infraestructura. Todo ello convierte al Business Intelligence en candidato idóneo a ser suministrado como un servicio en red por un proveedor especializado como Telefónica. Máxime cuando el grado de madurez, ya alcanzado por la oferta disponible en el mercado, hace que el uso de una u otra alternativa de tecnología diste mucho de representar alguna ventaja competitiva para la empresa.
Pero en el entorno económico actual, los enfoques de BI tradicionales ya no son suficientes. El continuo aumento de la competencia en los mercados globales ha hecho que, en la mayoría de los casos, ya no sea suficiente con mejorar factores como la eficiencia operativa o la reducción de costes. En adelante, resultará imprescindible además, que las empresas sean capaces de diferenciarse por su capacidad de atraer y retener clientes, y por tanto, la BI diseñada para este fin irá cobrando una creciente relevancia en el mercado.
De cualquier modo, aunque la mayoría de las organizaciones reconoce ya como una necesidad crítica el desarrollo de proyectos de Business Intelligence en uno u otro sentido, el camino no deja de estar plagado de dificultades. En primer lugar, nunca en ningún otro ámbito se ha hecho más patente la necesidad de alinear las TI y el negocio. Se hace además imprescindible contar con soluciones flexibles y escalables que se adapten al enfoque vivo y continuado que la BI requiere para ajustarse al dinamismo actual de los negocios, el cual convierte en imprevisibles y siempre cambiantes las necesidades de infraestructura. Todo ello convierte al Business Intelligence en candidato idóneo a ser suministrado como un servicio en red por un proveedor especializado como Telefónica. Máxime cuando el grado de madurez, ya alcanzado por la oferta disponible en el mercado, hace que el uso de una u otra alternativa de tecnología diste mucho de representar alguna ventaja competitiva para la empresa.
