Las ventas de IBM caen un 12% pese al lanzamiento de un nuevo mainframe
Pese a la llegada al mercado del nuevo z13 el pasado mes, el gigante Azul no ha podido evitar el desplome de sus ventas en el primer trimestre de 2015.
IBM cerró el 31 de marzo el ejercicio correspondiente al primer trimestre de 2015 con un volumen de negocio cercano a los 19.600 millones de euros, y un beneficio un 5 por ciento por debajo del trimestre anterior, con solo 2.400 millones de dólares. Dos tercios del volumen del negocio de la compañía provienen del exterior, y la situación de un dólar fuerte no hace más que contribuir al debilitamiento de los resultados de la firma.
“De no haber sido por el impacto de una divisa norteamericana pujante, los ajustes realizados por la compañía a través de la venta reciente de ciertos negocios, junto con un sostenido volumen de nuestras ventas, hubiesen dado un resultado similar al obtenido en 2014, ha señalado Martin Schroeter, CFO de IBM.
Al igual que su rival Hewlett-Packard, IBM ha visto como su negocio menguaba trimestre tras trimestre, y ha sido testigo de ver cómo sus clientes gastaban cada vez menos en costoso hardware y en servicios de TI, dedicando por contra más recursos a los procesos relacionados con la movilidad y el cloud computing. HP está tratando de lidiar con el problema dividiéndose en dos compañías de escaso provecho, como su división de servidores x86, e invertirá en áreas donde esperará crecer.
IBM señalaba que, pese a disponer de unos planes estratégicos que auguran un crecimiento de un 20% en cloud y en sistemas de análisis en el plazo de un año, este incremento resulta insuficiente para absorber la caída en picado que sufren las ventas de la organización a nivel general.
Se verá si los nuevos productos hardware que IBM está a punto de lanzar, el comporamiento de las ventas procedentes de su línea de mainframes –una división que doblo su cifra de negocio con respecto a 2013-, y las ventas de la división de sus servidores Power remontan la tendencia descendiente que la compañía arrastra desde hace tiempo. Schroeter confía en que el lanzamiento del nuevo chip Power 8 para sus servidores en el segundo trimestre de este año obre el milagro de la recuperación.
