Operadores de redes móviles virtuales:
Un sector con turbulencias
Aquellas compañías interesadas en lanzarse al mercado de los operadores de redes virtuales móviles en Europa, uno de los sectores que más atención está generando en los últimos meses por sus proyecciones de negocio, deberían pensárselo primero dos veces si no son telecoms. Al menos esto es lo que aconseja la consultora Forrester Research en un reciente estudio sobre esta industria. La simple denominación “operador de redes virtuales móviles” es un concepto poderoso que tan sólo beneficiará a aquellas firmas con marcas potentes, nichos de clientela establecidos, fuerte soporte por parte de la dirección y negocios clave fácilmente movilizables.
Se trata de un sector que parece ofrecer oportunidades aún por explotar para crear valor a costa de un riesgo pequeño, aunque sólo aparentemente: mientras las compañías interesadas en participar en este negocio están invirtiendo cientos de millones en desarrollar servicios de atención al cliente y estrategias de marketing para construir sus marcas y ganar la confianza de los usuarios, todo indica que tan sólo unas pocas podrán competir a la altura de los operadores móviles utilizando esta estrategia, que puede conducirles, sin embargo, a una pérdida de clientes en las líneas claves de producto.
Las previsiones apuntan que docenas de operadores de redes virtuales móviles potenciales ignorarán estos riesgos y se lanzarán sin dudarlo a los mercados europeos. Aprovechando el apoyo indirecto por parte de quienes demandan la regulación de la competencia en esta industria, los operadores de redes ya establecidos con capacidades adicionales serán quienes marquen las reglas del juego para las compañías interesadas en subcontratar dichas capacidades.
Por ello, las conclusiones de Forrester, lejos de predicar el cese de las nuevas iniciativas de servicios móviles, conminan a la adopción de estrategias alternativas con menores niveles de compromiso y riesgos asociados. De este modo, se aconseja crear ofertas de SMS (servicios de mensajes cortos) o páginas WAP sin forzar el compromiso a largo plazo por parte de particulares y empresas. Otra alternativa sería utilizar los servicios de una empresa canalizadora de tráfico que pueda distribuirlo a través de un portal móvil, lo que supondría sólo un compromiso a corto plazo con un socio específico.
Esperando a 2004
Las capacidades que pueden aportar los operadores de redes virtuales móviles ayudarán a las empresas a obtener un mayor volumen de ventas, reducir costes y a diferenciarse de sus competidores. Quienes se adentren en este mercado tendrán que ofrecer soluciones de redes que soporten las conexiones a los sistemas back-office aún inexistentes en las redes móviles. Llevará meses e incluso años diseñar, desarrollar y evaluar los dispositivos requeridos por estos operadores. Los elevados precios de los receptores de tráfico de datos y los sistemas GSM mantendrán una producción reducida mientras que el retorno de las inversiones continúe siendo difícil de cuantificar.
Además, hay que tener en cuenta que los actuales operadores aún no están en condiciones de soportar los requisitos de fiabilidad, cobertura y tiempo de funcionamiento de estos dispositivos. Por ello, este mercado no generará una facturación sustancial hasta 2004. Las barreras de entrada se irán erosionando conforme se incremente la velocidad de transmisión de los datos móviles y los operadores garanticen mayores niveles de servicio. Al mismo tiempo, los consumidores empezarán a demandar PDA con conexiones a redes móviles y MP3 players capaces de descargar audio en cualquier momento. Asimismo, las comunicaciones de máquina a máquina constituirán la próxima generación de sistemas una vez que se haya generalizado la implantación de soluciones ERP y cadenas de suministro. En definitiva, todas las predicciones apuntan a que, entre 2004 y 2006, asistiremos al boom de los dispositivos requeridos por los operadores de redes virtuales móviles.
Jorge Zlotnik, Director General de Emprosoft, S.A.
Se trata de un sector que parece ofrecer oportunidades aún por explotar para crear valor a costa de un riesgo pequeño, aunque sólo aparentemente: mientras las compañías interesadas en participar en este negocio están invirtiendo cientos de millones en desarrollar servicios de atención al cliente y estrategias de marketing para construir sus marcas y ganar la confianza de los usuarios, todo indica que tan sólo unas pocas podrán competir a la altura de los operadores móviles utilizando esta estrategia, que puede conducirles, sin embargo, a una pérdida de clientes en las líneas claves de producto.
Las previsiones apuntan que docenas de operadores de redes virtuales móviles potenciales ignorarán estos riesgos y se lanzarán sin dudarlo a los mercados europeos. Aprovechando el apoyo indirecto por parte de quienes demandan la regulación de la competencia en esta industria, los operadores de redes ya establecidos con capacidades adicionales serán quienes marquen las reglas del juego para las compañías interesadas en subcontratar dichas capacidades.
Por ello, las conclusiones de Forrester, lejos de predicar el cese de las nuevas iniciativas de servicios móviles, conminan a la adopción de estrategias alternativas con menores niveles de compromiso y riesgos asociados. De este modo, se aconseja crear ofertas de SMS (servicios de mensajes cortos) o páginas WAP sin forzar el compromiso a largo plazo por parte de particulares y empresas. Otra alternativa sería utilizar los servicios de una empresa canalizadora de tráfico que pueda distribuirlo a través de un portal móvil, lo que supondría sólo un compromiso a corto plazo con un socio específico.
Esperando a 2004
Las capacidades que pueden aportar los operadores de redes virtuales móviles ayudarán a las empresas a obtener un mayor volumen de ventas, reducir costes y a diferenciarse de sus competidores. Quienes se adentren en este mercado tendrán que ofrecer soluciones de redes que soporten las conexiones a los sistemas back-office aún inexistentes en las redes móviles. Llevará meses e incluso años diseñar, desarrollar y evaluar los dispositivos requeridos por estos operadores. Los elevados precios de los receptores de tráfico de datos y los sistemas GSM mantendrán una producción reducida mientras que el retorno de las inversiones continúe siendo difícil de cuantificar.
Además, hay que tener en cuenta que los actuales operadores aún no están en condiciones de soportar los requisitos de fiabilidad, cobertura y tiempo de funcionamiento de estos dispositivos. Por ello, este mercado no generará una facturación sustancial hasta 2004. Las barreras de entrada se irán erosionando conforme se incremente la velocidad de transmisión de los datos móviles y los operadores garanticen mayores niveles de servicio. Al mismo tiempo, los consumidores empezarán a demandar PDA con conexiones a redes móviles y MP3 players capaces de descargar audio en cualquier momento. Asimismo, las comunicaciones de máquina a máquina constituirán la próxima generación de sistemas una vez que se haya generalizado la implantación de soluciones ERP y cadenas de suministro. En definitiva, todas las predicciones apuntan a que, entre 2004 y 2006, asistiremos al boom de los dispositivos requeridos por los operadores de redes virtuales móviles.
Jorge Zlotnik, Director General de Emprosoft, S.A.
