Nortel, Zafirovski y el liderazgo
Hace más de un año desde que Mike Zafirovski dejó Motorola para incorporarse como CEO a Nortel. En este tiempo no le ha faltado tarea: ha reestructurado la alta gestión de la compañía, ha reforzado su negocio de empresa, se ha centrado en el desarrollo de productos, ha reducido los costes, ha instituido principios éticos y de calidad, y ha fijado objetivos de ventas y beneficios. Y todo ello con el fin de devolver a la compañía a la posición de liderazgo global de la que una vez gozó junto a unos pocos competidores y de la que los malos años del sector la fue apartando poco a poco.
En unas recientes declaraciones a IDG, Zafirovski declaraba su convencimiento de que los tiempos están cambiando para la compañía que dirige. “Nortel es una empresa muy apasionada que realmente quiere marcar la diferencia, ser una gran alternativa. Hemos liderado la mayoría de los segmentos de comunicaciones, incluyendo la evolución a IP, y nos hemos comprometido a volver al liderazgo, poniendo la innovación como competencia central y con una comercialización más inteligente de la tecnología. Y lo que es más importante, estamos dando a nuestro negocio más flexibilidad que cualquier otra compañía”.
De sus planes por impulsar nuevos desarrollos y de competir firme sólo en aquellas áreas donde ya tenga una posición significativa fue buena muestra la venta a Alcatel (ahora Alcatel-Lucent) de su negocio de UMTS. “Estamos comprometidos en ser verdaderamente relevantes en todas las áreas en las que compitamos”, asegura Zafirovski, y recuerda su buena posición en algunos mercados, como los de CDMA, VoIP para empresas, conmutación Ethernet y equipamiento óptico, donde “somos un fuerte número dos”. Más aún, la compañía ocupa la primera posición en otras áreas, como VoIP para operadores, Metro Ethernet y conmutación de paquetes. “Lo que nos llevó a salir de UMTS fue justo esta razón: una cuota de mercado de cuatro o cinco puntos, puede que siete, es insignificante. Nuestro reto es gastar bien”.
De las prioridades marcadas por Nortel para 2007, como móviles, Metro Ethernet o Servicios Globales, Zafirovski destaca especialmente sus expectativas en el mercado de empresa, donde pone muchas esperanzas en la alianza de la compañía con Microsoft. “Es muy excitante pensar qué seremos capaces de hacer en el área de empresas, sacando partido de la colaboración de Microsoft en comunicaciones unificadas”. ¿Y qué pueden esperar los usuarios de esta unión de intereses? “Un más fuerte alineamiento entre sus productos y los nuestros. Y lo verán en parte ya en el último tramo de 2007, aunque será más evidente en 2008 y los años siguientes. Lo más significativo es que esta alianza nos está abriendo puertas a ambos”.
También resalta su colaboración con IBM, aunque sin detalles, remitiendo a este 2007 recién empezado como el momento en que se dará a conocer su campaña “Nortel Inside” con el gigante informático. Una alianza en que, en otras áreas de negocio, como el de aplicaciones IP Multimedia Systems (IMS) ya está trabajando.
Parece que la entrada de Zafirovski en Nortel, que está suponiendo además de un rearme ético, tras los problemas contables del pasado, y un compromiso con la innovación, la calidad y las mejores prácticas de comercialización y ventas, está lavando la imagen de un fabricante obligado a reinventarse para sobrevivir en la tierra de lobos en que se ha convertido el mercado de telecomunicaciones.
“A favor de la consolidación”
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Algunos analistas ven la ausencia de Nortel de los actuales procesos de consolidación como un factor negativo para su supervivencia a largo plazo, pero, según el CEO de la compañía, también ellos están inmersos en el mismo proceso, al que de ningún modo hace ascos. “¿Complementar algún área de nuestra oferta en algún momento futuro será beneficioso? Por supuesto. Estaremos muy atentos al respecto”. No en vano, Zafirovski afirma rotundo estar a favor de la consolidación”, recordando los pasos dados hasta ahora en esta dirección. “¿Planeamos crecer inorgánicamente? Sí. Compramos Tasman Networks, especializada en routing de empresa, y PEC, un integrador dedicado a la Administración. También tenemos una joint venture con LG Electronics”.
En unas recientes declaraciones a IDG, Zafirovski declaraba su convencimiento de que los tiempos están cambiando para la compañía que dirige. “Nortel es una empresa muy apasionada que realmente quiere marcar la diferencia, ser una gran alternativa. Hemos liderado la mayoría de los segmentos de comunicaciones, incluyendo la evolución a IP, y nos hemos comprometido a volver al liderazgo, poniendo la innovación como competencia central y con una comercialización más inteligente de la tecnología. Y lo que es más importante, estamos dando a nuestro negocio más flexibilidad que cualquier otra compañía”.
De sus planes por impulsar nuevos desarrollos y de competir firme sólo en aquellas áreas donde ya tenga una posición significativa fue buena muestra la venta a Alcatel (ahora Alcatel-Lucent) de su negocio de UMTS. “Estamos comprometidos en ser verdaderamente relevantes en todas las áreas en las que compitamos”, asegura Zafirovski, y recuerda su buena posición en algunos mercados, como los de CDMA, VoIP para empresas, conmutación Ethernet y equipamiento óptico, donde “somos un fuerte número dos”. Más aún, la compañía ocupa la primera posición en otras áreas, como VoIP para operadores, Metro Ethernet y conmutación de paquetes. “Lo que nos llevó a salir de UMTS fue justo esta razón: una cuota de mercado de cuatro o cinco puntos, puede que siete, es insignificante. Nuestro reto es gastar bien”.
De las prioridades marcadas por Nortel para 2007, como móviles, Metro Ethernet o Servicios Globales, Zafirovski destaca especialmente sus expectativas en el mercado de empresa, donde pone muchas esperanzas en la alianza de la compañía con Microsoft. “Es muy excitante pensar qué seremos capaces de hacer en el área de empresas, sacando partido de la colaboración de Microsoft en comunicaciones unificadas”. ¿Y qué pueden esperar los usuarios de esta unión de intereses? “Un más fuerte alineamiento entre sus productos y los nuestros. Y lo verán en parte ya en el último tramo de 2007, aunque será más evidente en 2008 y los años siguientes. Lo más significativo es que esta alianza nos está abriendo puertas a ambos”.
También resalta su colaboración con IBM, aunque sin detalles, remitiendo a este 2007 recién empezado como el momento en que se dará a conocer su campaña “Nortel Inside” con el gigante informático. Una alianza en que, en otras áreas de negocio, como el de aplicaciones IP Multimedia Systems (IMS) ya está trabajando.
Parece que la entrada de Zafirovski en Nortel, que está suponiendo además de un rearme ético, tras los problemas contables del pasado, y un compromiso con la innovación, la calidad y las mejores prácticas de comercialización y ventas, está lavando la imagen de un fabricante obligado a reinventarse para sobrevivir en la tierra de lobos en que se ha convertido el mercado de telecomunicaciones.
“A favor de la consolidación”
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Algunos analistas ven la ausencia de Nortel de los actuales procesos de consolidación como un factor negativo para su supervivencia a largo plazo, pero, según el CEO de la compañía, también ellos están inmersos en el mismo proceso, al que de ningún modo hace ascos. “¿Complementar algún área de nuestra oferta en algún momento futuro será beneficioso? Por supuesto. Estaremos muy atentos al respecto”. No en vano, Zafirovski afirma rotundo estar a favor de la consolidación”, recordando los pasos dados hasta ahora en esta dirección. “¿Planeamos crecer inorgánicamente? Sí. Compramos Tasman Networks, especializada en routing de empresa, y PEC, un integrador dedicado a la Administración. También tenemos una joint venture con LG Electronics”.
