Luces, sombras y recelos
Mercado de MMS
En general, fabricantes y operadores coinciden en pronosticar un excelente futuro a la nueva mensajería móvil multimedia, y hay estudios de todo tipo que van en la misma dirección. Lo cierto es que tampoco faltan algunas voces discordantes que prefieren acercarse a MMS con cautela para no caer de nuevo en excesos que, a la larga, todos paguemos muy caro.
La sensación general en la industria de las telecomunicaciones es que MMS está llamado a convertirse en una nueva gran oportunidad de mercado. Un estudio de Nokia, por ejemplo, estima que en 2005, los mensajes móviles multimedia superarán al sistema SMS como el mayor generador de ingresos de mensajería interpersonal. Según el fabricante, la sólida base actual de usuarios de SMS asegura el despegue de MMS. “El mercado muestra una saludable prevalencia de los mensajes cortos como forma de comunicación interpersonal, lo que favorecerá la inminente llegada de nuevos usuarios de mensajería móvil avanzada, aumentando de forma considerable los ingresos de los operadores”, comenta Julio Navío, director de Tecnología de Nokia Networks.
A partir de más de 12.000 entrevistas realizadas en distintos mercados internacionales, el estudio, publicado el pasado verano, concluye que existe “un fértil mercado para los nuevos servicios de mensajería”. Nokia considera que el desarrollo del mercado MMS será importante debido a la masiva presencia de los actuales y nuevos dispositivos de mensajería móvil, así como a los hábitos de consumo de los usuarios SMS.
Algunas estimaciones y prospecciones son tan optimistas que incluso Simon Buckingham, CEO de Mobile Streams, opina que “la transición de SMS a MMS será tan importante en los teléfonos móviles como en su día resultó la transición de DOS a Windows en el PC”. Sin embargo, en estos días inciertos, ni las operadoras de redes ni los fabricantes de terminales quieren repetir una situación parecida al auge y caída de las empresas puntocom y UMTS, e intentan combinar la euforia con el sentido común.
¿Cómo WAP?
Tampoco faltan los análisis en cierto sentido escépticos, que, hastiados de tanta burbuja pinchada, recelan de tan altas expectativas. Un informe de Wireless World Forum señala que los mensajes multimedia corren el riesgo de convertirse en otra tecnología sobrevalorada como WAP. El estudio, elaborado mediante consultas a ejecutivos clave entre 3.000 miembros de la industria, predice que MMS facturará un total de 5.900 millones de euros en 16 mercados clave (Australia, Canadá, Finlandia, Francia, Alemania, Hong-Kong, Irlanda, Israel, Italia, Países Bajos, Noruega, Portugal, España, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos). Estas cifras son un 80% más bajas que lo que auguraban muchos analistas de la industria. Los análisis actuales aventuran que se mandarán más de 20.000 millones de mensajes por mes en los dos próximos años, mientras que el estudio rebaja esta cifra a cerca de 200 millones.
Según los responsables del informe, las expectativas que se están manejando en torno a MMS resultan exageradas, en parte porque provienen de fuentes relacionadas con los proveedores de redes. En un mercado tan saturado como el de SMS no pueden vender más productos, por lo que tienen que vender nuevos servicios.
Por otro lado, existen voces que denuncian el papel secundario, cuando no olvido, que se está dando al principal factor de desarrollo de los servicios en general: los usuarios. Fabricantes y operadores confían en que el avance que supone MMS respecto a SMS –mayores velocidades, posibilidad de enviar mensajes a color con vídeo y audio...–, pero ello supondrá un aumento de precio de los mensajes, y es una incógnita si los usuarios se verán compensados con esas ventajas. El otro gran cliente de los servicios MMS, las corporaciones, también puede estar interesado en el nuevo sistema, pero se precisarán desarrollos muy potentes en los dispositivos que puedan soportar aplicaciones ideadas para los negocios, como, por ejemplo, visionar una conferencia en el móvil.
Tiempo al tiempo
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Lo verdaderamente importante de la mensajería MMS es que puede ser el revulsivo que necesitaba la industria de las telecomunicaciones para remontar la situación de crisis por la que atraviesa. Consultoras como Gartner estiman que será la demanda de servicios MMS el factor que catapulte la venta de móviles en el futuro, especialmente en el mercado europeo. Los fabricantes de dispositivos móviles ya están desarrollando una frenética actividad de marketing en torno a esta tecnología, lanzando modelos de gama baja, con lo que las cifras de venta de 2002 estarán en torno a los 420 millones de teléfonos móviles. Y es que, en el fondo, MMS no deja de ser la prolongación natural de los mensajes de texto, que ya tenían una importante base de usuarios en Europa y Asia. Las marcas principales del sector confirman estas grandes expectativas. Pero las expectativas son sólo eso, expectativas. Tiempo al tiempo.
La sensación general en la industria de las telecomunicaciones es que MMS está llamado a convertirse en una nueva gran oportunidad de mercado. Un estudio de Nokia, por ejemplo, estima que en 2005, los mensajes móviles multimedia superarán al sistema SMS como el mayor generador de ingresos de mensajería interpersonal. Según el fabricante, la sólida base actual de usuarios de SMS asegura el despegue de MMS. “El mercado muestra una saludable prevalencia de los mensajes cortos como forma de comunicación interpersonal, lo que favorecerá la inminente llegada de nuevos usuarios de mensajería móvil avanzada, aumentando de forma considerable los ingresos de los operadores”, comenta Julio Navío, director de Tecnología de Nokia Networks.
A partir de más de 12.000 entrevistas realizadas en distintos mercados internacionales, el estudio, publicado el pasado verano, concluye que existe “un fértil mercado para los nuevos servicios de mensajería”. Nokia considera que el desarrollo del mercado MMS será importante debido a la masiva presencia de los actuales y nuevos dispositivos de mensajería móvil, así como a los hábitos de consumo de los usuarios SMS.
Algunas estimaciones y prospecciones son tan optimistas que incluso Simon Buckingham, CEO de Mobile Streams, opina que “la transición de SMS a MMS será tan importante en los teléfonos móviles como en su día resultó la transición de DOS a Windows en el PC”. Sin embargo, en estos días inciertos, ni las operadoras de redes ni los fabricantes de terminales quieren repetir una situación parecida al auge y caída de las empresas puntocom y UMTS, e intentan combinar la euforia con el sentido común.
¿Cómo WAP?
Tampoco faltan los análisis en cierto sentido escépticos, que, hastiados de tanta burbuja pinchada, recelan de tan altas expectativas. Un informe de Wireless World Forum señala que los mensajes multimedia corren el riesgo de convertirse en otra tecnología sobrevalorada como WAP. El estudio, elaborado mediante consultas a ejecutivos clave entre 3.000 miembros de la industria, predice que MMS facturará un total de 5.900 millones de euros en 16 mercados clave (Australia, Canadá, Finlandia, Francia, Alemania, Hong-Kong, Irlanda, Israel, Italia, Países Bajos, Noruega, Portugal, España, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos). Estas cifras son un 80% más bajas que lo que auguraban muchos analistas de la industria. Los análisis actuales aventuran que se mandarán más de 20.000 millones de mensajes por mes en los dos próximos años, mientras que el estudio rebaja esta cifra a cerca de 200 millones.
Según los responsables del informe, las expectativas que se están manejando en torno a MMS resultan exageradas, en parte porque provienen de fuentes relacionadas con los proveedores de redes. En un mercado tan saturado como el de SMS no pueden vender más productos, por lo que tienen que vender nuevos servicios.
Por otro lado, existen voces que denuncian el papel secundario, cuando no olvido, que se está dando al principal factor de desarrollo de los servicios en general: los usuarios. Fabricantes y operadores confían en que el avance que supone MMS respecto a SMS –mayores velocidades, posibilidad de enviar mensajes a color con vídeo y audio...–, pero ello supondrá un aumento de precio de los mensajes, y es una incógnita si los usuarios se verán compensados con esas ventajas. El otro gran cliente de los servicios MMS, las corporaciones, también puede estar interesado en el nuevo sistema, pero se precisarán desarrollos muy potentes en los dispositivos que puedan soportar aplicaciones ideadas para los negocios, como, por ejemplo, visionar una conferencia en el móvil.
Tiempo al tiempo
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Lo verdaderamente importante de la mensajería MMS es que puede ser el revulsivo que necesitaba la industria de las telecomunicaciones para remontar la situación de crisis por la que atraviesa. Consultoras como Gartner estiman que será la demanda de servicios MMS el factor que catapulte la venta de móviles en el futuro, especialmente en el mercado europeo. Los fabricantes de dispositivos móviles ya están desarrollando una frenética actividad de marketing en torno a esta tecnología, lanzando modelos de gama baja, con lo que las cifras de venta de 2002 estarán en torno a los 420 millones de teléfonos móviles. Y es que, en el fondo, MMS no deja de ser la prolongación natural de los mensajes de texto, que ya tenían una importante base de usuarios en Europa y Asia. Las marcas principales del sector confirman estas grandes expectativas. Pero las expectativas son sólo eso, expectativas. Tiempo al tiempo.
