Los nuevos caminos de EDI

Intercambio de documentos en la Web

Todo hace suponer que las nuevas plataformas de comercio electrónico experimentarán un importante crecimiento en los próximos años. De acuerdo con las previsiones de la consultora Dataquest, los servicios EDI a través de Internet crecerán hasta alcanzar los 200 millones de dólares hacia el año 2000, cifra que adquiere una mayor relevancia si tenemos en cuenta que los ingresos generados por estos sistemas durante 1996 fueron prácticamente nulos. Por lo que respecta al mercado EDI en su totalidad, según la consultora, pasará de 687 millones de dólares en 1996 a, aproximadamente, 1.400 millones, volumen del que Internet acaparará el 14 por ciento.


Problemas que resolver
Pero a pesar de estas optimistas expectativas, los analistas sugieren que existen ciertas cuestiones de suma importancia que exigen ser resueltas antes de que EDI esté en condiciones de irrumpir definitiva y exitosamente en el horizonte del tráfico IP. Entre los principales problemas que hacen de EDI en Internet una complicada alternativa para hacer negocios cabe citar la existencia de protocolos de transmisión diferentes entre Europa y Norteamérica, o la de alrededor de 4.400 tipos de transacciones diferentes.

Por el contrario, la mayoría de los usuarios asocian Internet con la simplicidad y la universalidad, lo que constituye un factor psicológico de gran peso que podría impulsar su utilización como un instrumento para realizar negocios. Tanto las intranets como las extranets son percibidas como medios especialmente adecuados para llevar a cabo la automatización de la totalidad de la cadena de negocio de una empresa, tanto en lo que se refiere a sus relaciones con sus suministradores y clientes como con sus bancos y firmas de sistemas de pago.

Esto, unido al hecho de que toda filosofía empresarial lleva siempre implícita la continua búsqueda de vías más simples y sencillas que permitan reducir los costes de operación y explotación del negocio, hacen lógico asumir que el EDI tal y como ha sido concebido hasta el presente terminará por ceder su puesto a alguna forma de comercio electrónico basada en Internet. Pero como sucede con el mismo EDI, las cosas no son tan simples ni tan complicadas como parecen a primera vista.

Además de la justificación del cambio de plataforma en términos de ahorro de costes, la previa disponibilidad de interfaces con los sistemas de inventario y de contabilidad existentes, así como la de métodos comunes de traducción, son tan sólo algunos de los obstáculos que el EDI basado en la Web tendrá que superar si desea llegar a ser algo más que una ambiciosa utopía.

Y como siempre, la cuestión de la seguridad tendrá su importancia. En este sentido, es lógico que trasladar los datos críticos de las empresas fuera de sus redes propietarias o de valor añadido para colocarlos sobre una red abierta como Internet suponga una decisión difícil de tomar.


Gráfico at120-002.gif (31245 bytes)

La seguridad, una preocupación constante
Dentro del mundo del comercio electrónico ésta es un área a la cual el usuario nunca dejará de prestar atención, dado que una seguridad absoluta es, y continuará siendo, algo imposible de conseguir de una vez por todas. En opinión de algunos expertos, el hecho de adoptar una postura activa ante el problema produce, a nivel psicológico, una mayor sensación de seguridad en el usuario. Algo especialmente recomendable es recurrir a los sistemas basados en la utilización e intercambio de claves.

De cualquier modo, aun en el caso de que las compañías logren hallar un medio de aliviar sus preocupaciones en relación con este punto, el EDI basado en Web continuará teniendo importantes barreras que derribar. Y la inercia no es precisamente una de las menos resistentes. Para aquellas empresas que ya cuenten con algún sistema EDI instalado, el cambio a una plataforma Web no supone únicamente la adopción de una nueva tecnología, sino también la inversión de los recursos económicos necesarios para su adquisición. E incluso, en algunos casos, la renuncia a las inversiones realizadas con anterioridad. A lo largo de los últimos años, muchas empresas han venido destinando millones de dólares a la construcción de sistemas EDI y a la integración de los mismos con sus sistemas warehouse y de entrada de pedidos, así como con sus paquetes de contabilidad y plataformas tecnológicas en general.


Soluciones a medida
Las empresas de pequeño tamaño han de aceptar que serán los líderes de cada industria los que determinarán la línea de evolución de EDI, así como los que decidirán cómo será utilizado el sistema y cuáles serán los protocolos y los métodos de reparto considerados estándares. También serán las grandes compañías de cada sector las que impondrán o no a las más pequeñas la necesidad de intalar un sistema EDI, en el caso, por supuesto, de que éstas últimas deseen vender a aquéllas.

No obstante, quizá sea precisamente la pyme el tipo de entidad que mayor atractivo puede encontrar en una solución EDI basada en la Web, principalmente por su bajo coste. La posibilidad de tratar directamente con clientes y proveedores a través de Internet eliminando los gastos asociados a la utilización de procedimientos tradicionales, y sin necesidad de asumir los costes correspondientes a los servicios de las redes de valor añadido, constituyen para la pequeña empresa una alternativa muy tentadora. Hasta ahora pocas de ellas han podido recurrir a la electrónica como un medio de facilitar y abaratar sus operaciones, precisamente porque los costes asociados a este tipo de servicios no eran compensados generalmente por los potenciales beneficios que aportaban al negocio. Este ha sido el error de planteamiento que siempre ha acompañado a los sistemas EDI y que Internet tiene la oportunidad de erradicar.

Asimismo, IBM Global Network, que ocupa la segunda posición mundial en el mercado EDI, tras GEIS, también tiene planes en este sentido, al igual que, en el plano exclusivamente español, Telefónica Servicios Avanzados de Información (TSAI).

La principal ventaja de esta clase de propuestas reside fundamentalmente en que brindan al usuario un alto grado de seguridad y prestaciones sin los quebraderos de cabeza que supone la instalación y el mantenimiento de una plataforma propia. Utilizan estándares Internet de seguridad, son fáciles de utilizar y permiten al cliente desentenderse de cualquier complicación asociada al comercio electrónico, disfrutando sin embargo de sus ventajas, lo que lo convierte en una alternativa idónea para pequeñas empresas.

Mientras GEIS y otros proveedores de servicios de valor añadido han apostado por una aproximación Internet pura a EDI, otros han intentado combinar la Web con redes específicas de la industria en algo muy similar a una intranet/extranet. De esta forma, cada compañía puede comunicarse directamente con el resto e intercambiar transacciones comerciales vía SMTP, así como correo electrónico TCP/IP. Utilizando la intranet también puede proporcionarse información y servicios de valor añadido de terceros.

Ex

Contenido Patrocinado

Fernando Rubio Román, CTO de Microsoft España. TECNOLOGÍA
Forma parte de nuestra comunidad

 

¿Te interesan nuestras conferencias?

 

 
Cobertura de nuestros encuentros
 
 
 
 
Lee aquí nuestra revista de canal

DealerWorld Digital