Esperando a los operadores móviles virtuales

Comenzamos 2002 y, mirando hacia atrás, vemos que ya se han cumplido tres años desde que el mercado español de las telecomunicaciones se liberalizara desde el punto de vista formal, proceso que ha permitido que se hayan experimentado grandes transformaciones en el sector. Y dentro de éste, el de la telefonía móvil es el que más rápido ha crecido y evolucionado, hasta el punto de que hoy el mercado necesita un giro que consolide lo ya alcanzado. Se trata, fundamentalmente, de asegurar la generación de servicios de telecomunicaciones de calidad y potenciar la capacidad innovadora y competitiva de las empresas.
Una de las acciones que, previsiblemente, fomentará la oferta de nuevos servicios y la aparición de más competencia en la telefonía móvil es la aprobación de la norma que modifica la Orden de Licencias de 22 de septiembre de 1998, y que dará cabida a los ya conocidos operadores móviles virtuales (OMVs). A mediados del año pasado, el Ministerio de Ciencia y Tecnología anunció su intención de enviar su proyecto de modificación a diferentes agentes del sector, entre los que se encontraba Autel, que consideró necesario y valioso este proceso de cambio. En nuestra opinión, no sólo favorecerá el incremento de la competencia en el sector de las comunicaciones móviles, sino que, fundamentalmente, servirá para que se comiencen a desarrollar nuevas aplicaciones de datos móviles, algo imprescindible para que primero GPRS y después UMTS sean viables.

Más competencia y calidad. El OMV prestará servicios de comunicaciones móviles de voz y datos pero sin espectro radioeléctrico propio, por lo que habrán de recurrir al alquiler de las redes de los operadores ya existentes. Así, además de obtener la licencia que será introducida por la modificación de la orden, la relación que tenga con los operadores ya existentes se basará en libres acuerdos entre las partes, acuerdos que, desde la Asociación creemos deberán celebrarse en condiciones de transparencia, objetividad y no discriminación.
No es sólo la opinión de Autel que la figura del operador móvil virtual tendrá como objetivo introducir mayor competencia en el mercado de la telefonía móvil. La actual situación, en la que los operadores de servicios lo son también de redes, implica que los precios no tengan apenas variación. Así, la regulación de los OMV supone el elemento clave para variar este modelo de integración vertical, produciendo un mayor dinamismo en el mercado de las comunicaciones móviles.
En nuestra opinión, estos nuevos operadores pueden ser un elemento clave para lograr que la competencia en el sector de la telefonía móvil se incremente, algo que creemos ha de proporcionar ciertas ventajas a los usuarios, tales como la reducción de los precios finales o el aumento de la calidad y la variedad de los servicios. Además, como indicábamos al principio, los operadores móviles virtuales tendrán un papel importante en el desarrollo de la Internet móvil, que ya está empezando a estar disponible a través de GPRS, al introducir nuevos servicios y aplicaciones. De esta capacidad dependerá, en gran medida, el éxito de estos nuevos agentes.


AUTEL
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