2002: un año para el optimismo
2001: un año para olvidar. Todo iba muy deprisa. En muy poco tiempo Internet y el comercio electrónico revolucionarían las vidas de las empresas dando paso a todo un nuevo modelo de organización y negocio, que con la 3G se ampliaría también al mundo sin cables: las redes y las comunicaciones en general acabarían por dominar la Tierra. La realidad, luego, se impuso. Con condicionantes propios, la que se estaba cociendo al otro lado del Atlántico llegaba lenta pero implacablemente a éste. Después del verano la crisis era ya palpable: fiasco tecnológico y político en el parto de UMTS (finalmente postergado), despidos y suspensiones de pagos, caída del valor de las acciones, operadores y fabricantes seriamente tocados (algunos heridos, incluso de muerte), contracción prácticamente general del gasto en TI, fin de la intocabilidad del routing y la conmutación, X2X renqueante... El cielo debía esperar.
2002: un año para el optimismo. Las cosas ahora no están bien, pero al menos ya nos prometen el final del túnel. Si lo dice la Reserva Federal de Estados Unidos y los más destacados organismos internacionales, aunque no siempre aciertan, algo de razón tendrán. También lo dicen analistas y consultores, que ya revisan al alza sus negros presagios para este año sobre el mercado TIC en general. El sector de las telecomunicaciones es otra historia, abocada a una larga trayectoria de consolidación y reestructuraciones provocada por el evidente fracaso del modelo de liberalización impuesto en la UE. Pero es de esperar que, a medida que la economía mundial recobre el pulso, vuelvan a cobrar sentido algunas de las propuestas tecnológicas ahora prácticamente en stand-by, con una industria más consolidada y saneada, y un mayor optimismo en los presupuestos de TI. Y una vez aparcadas sine die las estupideces –propias de tiempos de euforia acrítica que ya no tiene sentido–, es hora de preparar el camino. Del 3 al 5 de abril, el recinto ferial Juan Carlos I de Madrid acoge la celebración conjunta de EXPO COMM y @asLAN, donde los profesionales de las comunicaciones pueden conocer las últimas tendencias de un sector llamado a revolucionar el mundo de los negocios.
2002: un año para el optimismo. Las cosas ahora no están bien, pero al menos ya nos prometen el final del túnel. Si lo dice la Reserva Federal de Estados Unidos y los más destacados organismos internacionales, aunque no siempre aciertan, algo de razón tendrán. También lo dicen analistas y consultores, que ya revisan al alza sus negros presagios para este año sobre el mercado TIC en general. El sector de las telecomunicaciones es otra historia, abocada a una larga trayectoria de consolidación y reestructuraciones provocada por el evidente fracaso del modelo de liberalización impuesto en la UE. Pero es de esperar que, a medida que la economía mundial recobre el pulso, vuelvan a cobrar sentido algunas de las propuestas tecnológicas ahora prácticamente en stand-by, con una industria más consolidada y saneada, y un mayor optimismo en los presupuestos de TI. Y una vez aparcadas sine die las estupideces –propias de tiempos de euforia acrítica que ya no tiene sentido–, es hora de preparar el camino. Del 3 al 5 de abril, el recinto ferial Juan Carlos I de Madrid acoge la celebración conjunta de EXPO COMM y @asLAN, donde los profesionales de las comunicaciones pueden conocer las últimas tendencias de un sector llamado a revolucionar el mundo de los negocios.
