20 años de avances y progresos
Las últimas dos décadas han sido protagonistas del cambio radical que han experimentado las TI y las telecomunicaciones, tanto en cuanto a desarrollo tecnológico como a nivel comercial y normativo. En estas páginas, Francisco Ros, secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la SI, y los representantes de las más destacadas asociaciones sectoriales nos ofrecen su visión del pasado y del futuro de este mercado.
Comunicaciones Wolrd ha querido saber la opinión de todos ellos sobre estas dos cuestiones:
1. ¿Qué personajes y acontecimientos destacaría como de mayor trascendencia para el sector durante estos últimos 20 años?
2. ¿Qué frentes siguen abiertos? ¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrentará el sector en los próximos años?
Y estas son sus respuestas:
Francisco Ros
Secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información
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1. Según los últimos datos disponibles, relativos al año 2005, los ingresos del sector de las telecomunicaciones se sitúan en 40.878 millones de euros, lo que supone un incremento del 9,9% respecto a 2004, representando un porcentaje del 4,5% sobre el PIB. La inversión ha ascendido a 5.581 millones de euros en 2005, con un incremento del 19% respecto al año anterior, y en relación con el empleo, existen 92.468 personas ocupadas en el sector, un 5,1% de incremento en el último año.
Estos datos hablan por sí solos del magnífico momento por el que atraviesa el sector de las telecomunicaciones en España, que es fruto de una obra colectiva en la que una multitud heterogénea de agentes (Administraciones, operadores, fabricantes de equipos, instaladores, medios de comunicación y organizaciones civiles, entre otras) han contribuido de manera esencial, cada uno en su propio ámbito de actuación, para que este sector haya tenido una de las mejores proyecciones dentro de los distintos sectores de nuestra economía, gozando, asimismo, de una gran capacidad para competir en los ámbitos internacionales.
En definitiva, el usuario ve satisfechas sus cada vez más exigentes necesidades de información dentro de la Sociedad del Conocimiento en la que estamos inmersos, mediante una pluralidad de operadores que comercializan ofertas diferenciadas con servicios más novedosos, más adaptados a sus necesidades, de mayor calidad y a unos precios más bajos, por lo que puede afirmarse que el mercado de las telecomunicaciones en España es un éxito de todos y su futuro es muy halagüeño.
2. En este momento, nos encontramos ante un nuevo escenario abierto por la Comisión Europea. El pasado 29 de junio, la Comisión inició el proceso de revisión del “marco regulatorio de las comunicaciones electrónicas” con el ánimo de que en 2010 se haya reflejado en las legislaciones nacionales. El objetivo de esta revisión es ahondar aún más en el proceso de liberalización de las telecomunicaciones que se ha establecido en la Unión Europea, en la creación de un mercado interior cada vez más competitivo y con capacidad para trasladar sus bondades a los usuarios, y hacer frente al reto que plantea la convergencia tecnológica en servicios que se vienen ya prestando en la práctica de manera comercial.
España va a contribuir activamente a la construcción de este nuevo escenario, teniendo en cuenta los intereses de nuestra industria y el desarrollo de nuestros mercados.
Esta contribución se realizará sobre la base de los siguientes principios:
- Es fundamental la competencia y la reducción de precios, pero también lo son la inversión en red y en plataformas, y la innovación en servicios.
- Tal y como propone la Comisión, compartimos el objetivo de potenciar al máximo la neutralidad tecnológica y de servicios en la gestión del espectro.
- En cuanto al Servicio Universal, es necesario reformular conceptos que definan el conjunto mínimo de servicios, y especifiquen su calidad.
Maite Arcos
Directora de Operadores y Proveedores de Servicios de
Telecomunicación de Aetic (Asociación de Empresas de
electrónica, Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones de España)
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1. No citaría nombres concretos sino “ecosistemas” en los que distintos elementos multidisciplinares aúnan, en distintos grados y momentos, su aportación para lograr progresos significativos. Por todo ello, creo que los principales hitos de la historia reciente de las telecomunicaciones responden a casos de éxito del maridaje tecnológico, económico y social. Desde el punto de vista del progreso tecnológico es evidente que han sido fundamentales la multiplicación de la capacidad de las redes y su digitalización en los 80, la generalización de la computación personal, el desarrollo de tecnologías inalámbricas y el absoluto e impredecible éxito del proyecto WWW apoyado en el estándar HTML y el protocolo IP. Pero también, desde el punto de vista social hay que reconocer el papel que ha jugado la demanda generalizada en el uso y desarrollo de la telefonía móvil (en particular de los SMSs) y por supuesto en el desarrollo de Internet, que no deja de reinventarse gracias a los usos sociales (chats, blogs, comunidades sociales).
Desde la óptica económica, creo que los principales cambios han sido la desaparición de los monopolios públicos, la aparición de múltiples agentes que antes del estallido de la burbuja casi nos hicieron desechar por completo la teoría de los monopolios naturales y, últimamente, cuando desaparece ese punto de ebullición, asistimos a una configuración cada vez más consolidada de la industria de telecomunicaciones, tanto en Estados Unidos como en Europa, acompañada sin duda por el proceso de la convergencia tecnológica.
2. Siguiendo con los tres ingredientes que mencionaba anteriormente –el tecnológico, el económico y el social–, el primero de ellos sin duda seguirá pulverizando las leyes de capacidad de transmisión de redes y procesadores, y gracias a la convergencia tecnológica continuará difuminando barreras entre mercados (música, películas, videojuegos) y dando lugar a la aparición en los mercados de comunicaciones de nuevos agentes (Google, Yahoo), que aún tienen que definir su rol en este negocio.
También hay que tener en cuenta que uno de los retos más importantes en el futuro está relacionado con la satisfacción de necesidades sociales crecientes, como la telemedicina o la teleformación, para los que ya está disponible la base tecnológica pero que aún tiene que desarrollarse mucho más.
Y no hay que olvidar que todo ello vendrá determinado por el marco regulatorio, que siempre es determinante para los procesos de inversión y, por tanto, para el éxito o el fracaso de distintos proyectos empresariales. El reto es diseñar un marco de forma inteligente, es decir, lo suficientemente abierto para poder acoger los desarrollos tecnológicos y de mercado que hoy sólo se vislumbran y, a la vez, lo suficientemente estable para poder dar certidumbre a las iniciativas inversoras y permitir (no dirigir) el desarrollo del mercado como juego libre de la int
Comunicaciones Wolrd ha querido saber la opinión de todos ellos sobre estas dos cuestiones:
1. ¿Qué personajes y acontecimientos destacaría como de mayor trascendencia para el sector durante estos últimos 20 años?
2. ¿Qué frentes siguen abiertos? ¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrentará el sector en los próximos años?
Y estas son sus respuestas:
Francisco Ros
Secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información
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1. Según los últimos datos disponibles, relativos al año 2005, los ingresos del sector de las telecomunicaciones se sitúan en 40.878 millones de euros, lo que supone un incremento del 9,9% respecto a 2004, representando un porcentaje del 4,5% sobre el PIB. La inversión ha ascendido a 5.581 millones de euros en 2005, con un incremento del 19% respecto al año anterior, y en relación con el empleo, existen 92.468 personas ocupadas en el sector, un 5,1% de incremento en el último año.
Estos datos hablan por sí solos del magnífico momento por el que atraviesa el sector de las telecomunicaciones en España, que es fruto de una obra colectiva en la que una multitud heterogénea de agentes (Administraciones, operadores, fabricantes de equipos, instaladores, medios de comunicación y organizaciones civiles, entre otras) han contribuido de manera esencial, cada uno en su propio ámbito de actuación, para que este sector haya tenido una de las mejores proyecciones dentro de los distintos sectores de nuestra economía, gozando, asimismo, de una gran capacidad para competir en los ámbitos internacionales.
En definitiva, el usuario ve satisfechas sus cada vez más exigentes necesidades de información dentro de la Sociedad del Conocimiento en la que estamos inmersos, mediante una pluralidad de operadores que comercializan ofertas diferenciadas con servicios más novedosos, más adaptados a sus necesidades, de mayor calidad y a unos precios más bajos, por lo que puede afirmarse que el mercado de las telecomunicaciones en España es un éxito de todos y su futuro es muy halagüeño.
2. En este momento, nos encontramos ante un nuevo escenario abierto por la Comisión Europea. El pasado 29 de junio, la Comisión inició el proceso de revisión del “marco regulatorio de las comunicaciones electrónicas” con el ánimo de que en 2010 se haya reflejado en las legislaciones nacionales. El objetivo de esta revisión es ahondar aún más en el proceso de liberalización de las telecomunicaciones que se ha establecido en la Unión Europea, en la creación de un mercado interior cada vez más competitivo y con capacidad para trasladar sus bondades a los usuarios, y hacer frente al reto que plantea la convergencia tecnológica en servicios que se vienen ya prestando en la práctica de manera comercial.
España va a contribuir activamente a la construcción de este nuevo escenario, teniendo en cuenta los intereses de nuestra industria y el desarrollo de nuestros mercados.
Esta contribución se realizará sobre la base de los siguientes principios:
- Es fundamental la competencia y la reducción de precios, pero también lo son la inversión en red y en plataformas, y la innovación en servicios.
- Tal y como propone la Comisión, compartimos el objetivo de potenciar al máximo la neutralidad tecnológica y de servicios en la gestión del espectro.
- En cuanto al Servicio Universal, es necesario reformular conceptos que definan el conjunto mínimo de servicios, y especifiquen su calidad.
Maite Arcos
Directora de Operadores y Proveedores de Servicios de
Telecomunicación de Aetic (Asociación de Empresas de
electrónica, Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones de España)
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1. No citaría nombres concretos sino “ecosistemas” en los que distintos elementos multidisciplinares aúnan, en distintos grados y momentos, su aportación para lograr progresos significativos. Por todo ello, creo que los principales hitos de la historia reciente de las telecomunicaciones responden a casos de éxito del maridaje tecnológico, económico y social. Desde el punto de vista del progreso tecnológico es evidente que han sido fundamentales la multiplicación de la capacidad de las redes y su digitalización en los 80, la generalización de la computación personal, el desarrollo de tecnologías inalámbricas y el absoluto e impredecible éxito del proyecto WWW apoyado en el estándar HTML y el protocolo IP. Pero también, desde el punto de vista social hay que reconocer el papel que ha jugado la demanda generalizada en el uso y desarrollo de la telefonía móvil (en particular de los SMSs) y por supuesto en el desarrollo de Internet, que no deja de reinventarse gracias a los usos sociales (chats, blogs, comunidades sociales).
Desde la óptica económica, creo que los principales cambios han sido la desaparición de los monopolios públicos, la aparición de múltiples agentes que antes del estallido de la burbuja casi nos hicieron desechar por completo la teoría de los monopolios naturales y, últimamente, cuando desaparece ese punto de ebullición, asistimos a una configuración cada vez más consolidada de la industria de telecomunicaciones, tanto en Estados Unidos como en Europa, acompañada sin duda por el proceso de la convergencia tecnológica.
2. Siguiendo con los tres ingredientes que mencionaba anteriormente –el tecnológico, el económico y el social–, el primero de ellos sin duda seguirá pulverizando las leyes de capacidad de transmisión de redes y procesadores, y gracias a la convergencia tecnológica continuará difuminando barreras entre mercados (música, películas, videojuegos) y dando lugar a la aparición en los mercados de comunicaciones de nuevos agentes (Google, Yahoo), que aún tienen que definir su rol en este negocio.
También hay que tener en cuenta que uno de los retos más importantes en el futuro está relacionado con la satisfacción de necesidades sociales crecientes, como la telemedicina o la teleformación, para los que ya está disponible la base tecnológica pero que aún tiene que desarrollarse mucho más.
Y no hay que olvidar que todo ello vendrá determinado por el marco regulatorio, que siempre es determinante para los procesos de inversión y, por tanto, para el éxito o el fracaso de distintos proyectos empresariales. El reto es diseñar un marco de forma inteligente, es decir, lo suficientemente abierto para poder acoger los desarrollos tecnológicos y de mercado que hoy sólo se vislumbran y, a la vez, lo suficientemente estable para poder dar certidumbre a las iniciativas inversoras y permitir (no dirigir) el desarrollo del mercado como juego libre de la int
