Polémica en el Reino Unido tras el anuncio de BT de cambiar su política de alquiler de líneas

La asociación, que representa un amplio abanico de compañías de telecomunicaciones del Reino Unido, entre las que se incluyen Easynet, Opal Telecom, Orange, Cable & Wireless y Thus, dijo mostrarse “decepcionada” por la “lamentable situación” en que BT ha destapado sus problemas con sus cuentas financieras. Los informes se entregan anualmente al organismo regulador Ofcom sin embargo, BT está retrasando el anuncio de sus resultados financieros correspondientes a su ejercicio fiscal, que finalizó el pasado mes de julio.

En un comunicado hecho público a finales del pasado mes, BT Wholesale, que alquila el acceso a la línea a las otras compañías de telecomunicaciones, afirmaba que “la compañía consideraba necesario revisar la metodología que utiliza para estimar los ingresos procedentes de las líneas que alquila a otros operadores, pero que esto no impactará en los resultados financieros de BT Group”.

La UKCTA ha reaccionado de forma airada a las noticias de BT: “ la UKCTA está disgustada al saber que  BT ha destapado los problemas en sus declaraciones financieras reguladoras relativas al alquiler de líneas.... Las Cuentas Reguladoras de BT son una piedra angular del régimen regulador del Reino Unido, que Ofcom utiliza para fijar los precios de mayorista basados en el coste y actuar como una primera prueba de orden de que BT ha cumplido con algunas de sus obligaciones reguladoras más importantes”. Además, añade “como consecuencia del anuncio de BT, la confianza de que la compañía cumple con sus obligaciones reguladoras se ha visto seriamente dañada. En concreto, surgen dudas sobre la fiabilidad de las Cuentas Reguladoras de los años anteriores y sobre si BT tendrá que repetir las cuentas, así como si hay tras otros productos de telecomunicaciones que se hayan visto afectados".

La asociación dijo sentirse defraudada "después de años de preguntas" " y justo cuando Ofcom y la industria tienen que confiar en la información". Además, insta a BT a proporcionar los detalles financieros de modo que la industria confíe en que las inversiones que ha realizado en el acceso de próximo generación están “reguladas de forma apropiada”.

Hasta el momento, BT ha declinado hacer cualquier comentario.