Oracle da a conocer su estrategia en torno a Linux

Allen Miner, vicepresidente de desarrollo de negocio estratégico de Oracle, en el marco de Linux Showcase en Atlanta, ha reconocido la reciente versión de Oracle8 para Linux, presentada a principios de octubre, como el comienzo de una importante iniciativa que afectará al conjunto de aplicaciones Oracle Applications así como a Oracle 8i, nueva base de datos de la compañía que incluye una máquina virtual Java como plataforma de desarrollo de aplicaciones.

Según Miner, hasta ahora, Linux, a pesar de sus ventajas, ha venido representando un rompecabezas para muchos de los responsables empresariales ya que su arquitectura, basada en código de fuente abierto, permitía a cualquier experto modificar el sistema operativo subyacente. La inseguridad relacionada con su soporte y fiabilidad, unida a la escasez de aplicaciones para él desarrolladas, tampoco habrían contribuido demasiado a convertirlo en una alternativa sólidamente aceptada. Pero, en opinión de Miner, todo esto cambiará en los próximos meses.

En un discurso cuyo objetivo era argumentar sólidamente la importancia concedida a Linux en la estrategia futura de Oracle, comenzó intentando demostrar lo infundado de la preocupación en relación con la posibilidad de que Linux no esté realmente listo para hacer su irrupción en la empresa. También argumentó en contra de la idea de que la fuerza de este sistema operativo proviene de un enorme esfuerzo de marketing, asegurando que "El secreto del éxito de Linux es de naturaleza interna y reside en la suma de tecnología y potencia, no en el marketing".

En cualquier caso, Miner reconoció la importancia del papel que jugará su bajo coste de propiedad como factor determinante de la entrada de Linux en la empresa, añadiendo que el actual coste asociado a Windows es demasiado alto. "El precio que supone a una empresa el disponer de un entorno Microsoft Windows es mucho mayor que el asociado a Linux, porque éste último es más fiable, "ligero", y dispone de una mayor comunidad dedicada de desarrolladores, los cuales están altamente motivados para arreglar problemas al ser éstos identificados en cada momento y no en paquetes de servicios emitidos meses más tarde". Todo esto en su conjunto redunda, según Miner en un nivel más alto de satisfacción global del cliente, en menos tiempo de no-operatividad y en una mucho mayor productividad.

También subrayó su intención de impulsar diferentes alianzas con el objetivo de fortalecer la credibilidad de Linux ante los responsables empresariales. Aunque no facilitó demasiados detalles, sí reveló que estas iniciativas afectan a fabricantes de hardware como Hewlett-Packard e Intel, así como también a desarrolladores de software, incluido SAP. Otras empresas, como PeopleSoft y Baan, estarían también, según Miner, diseñando estrategias en torno a Linux.

Además, dedicó parte de su discurso a rebatir la idea de que Linux pudiera llegar a convertirse en el "asesino" de Windows, añadiendo que esta visión tan sólo puede acarrear problemas al primero al fomentar la percepción de una falsa oposición. "Los clientes desean poder elegir y para ello es necesario disponer de alternativas, tanto en sistemas operativos cliente como servidor. Por ello, es más que cuestionable, además de indeseable, la posibilidad de que Windows pueda llegar a desaparecer completamente".

Para finalizar, trazó los principales rasgos de la que, en su opinión, llegará a convertirse en una arquitectura informática basada en Internet, capaz de funcionar sobre una amplia variedad de tipos de hardware. En este escenario, Linux cobraría una, incluso, mayor relevancia dados algunos de los atributos que lo caracterizan, como es su independencia de hardware.