Los 19 rechazan la Autoridad Europea del Mercado de Telecomunicaciones
La Europa de los 19 considera necesaria una reforma del sector y que se realice una mejor gestión del espectro radioeléctrico pero rechaza la propuesta del Ejecutivo comunitario para crear un organismo regulador que esté por encima de los nacionales.
En un debate mantenido entre los ministros de Telecomunicaciones de la Unión Europea sobre las propuestas de la Comisión, éstos han puesto de manifiesto su rechazo para la creación de un organismo gubernamental europeo; mientras que en la separación funcional de las operadoras dominantes las opiniones han estado más diversificadas.
Los ministros de la UE están de acuerdo en que es necesaria una reforma en el sector para fomentar la competencia y reforzar la protección de los usuarios, y también lo están en que es preciso establecer una regulación del espectro radioeléctrico. Sin embargo, no consideran necesario crear un organismo que esté por encima de los reguladores nacionales ya que piensan que iría en detrimento de la autoridad de las entidades que ya existen en cada país.
En el debate sobre la segregación funcional de las operadoras, las opiniones fueron menos unánimes. España, Alemania y Rumania expresaron su rechazo mientras que Reino Unido, Italia y Países Bajos apoyaron la propuesta.
Desde España se argumenta que con esta medida se podría conseguir el efecto contrario, ya que el operador dominante podría afianzar su dominio al no tener sus competidores incentivos para desarrollar redes y plataformas propias. Alemania se expreso en la misma línea, mientras que Rumania resaltó que está medida no puede ser aplicable de la misma forma en todos los mercados.
Los ministros de la UE están de acuerdo en que es necesaria una reforma en el sector para fomentar la competencia y reforzar la protección de los usuarios, y también lo están en que es preciso establecer una regulación del espectro radioeléctrico. Sin embargo, no consideran necesario crear un organismo que esté por encima de los reguladores nacionales ya que piensan que iría en detrimento de la autoridad de las entidades que ya existen en cada país.
En el debate sobre la segregación funcional de las operadoras, las opiniones fueron menos unánimes. España, Alemania y Rumania expresaron su rechazo mientras que Reino Unido, Italia y Países Bajos apoyaron la propuesta.
Desde España se argumenta que con esta medida se podría conseguir el efecto contrario, ya que el operador dominante podría afianzar su dominio al no tener sus competidores incentivos para desarrollar redes y plataformas propias. Alemania se expreso en la misma línea, mientras que Rumania resaltó que está medida no puede ser aplicable de la misma forma en todos los mercados.
