La nueva caída de Telefónica arrastra a la Bolsa española a su mínimo histórico

De nuevo, Telefónica volvió a sufrir un serio revés en la Bolsa, cayendo un 5,12%. El Ibex Nuevo Mercado pudo contener su caída al final de la sesión, retrocediendo sólo un 1,21%, gracias a la revalorazación de Terra en un 2,21%. El Indice General perdió un 1,93%.


La caída de Telefónica, junto a las experimentadas por BBVA (2,67%) y BSCH (-1,55%), contribuyeron en gran medida a que la Bolsa española marcara su mínimo histórico. La jornada negra estuvo contaminada por los malos comportamientos de las bolsas internacionales y la caída generalizada que se viene produciendo en las últimas sesiones de los valores tecnológicos y, muy especialmente, las compañías de telecomunicaciones.

La mala situación bursátil de Telefónica desde que fracasara su fusión con KPN se ha traducido hasta el momento en una pérdida de 6,32 billones de pesetas de valor desde el 3 de marzo, pasando de 17,48 a 11,16 billones. La sesión de ayer vino precedida por una caída del valor del operador de un 6,03%. Ese día, el Ibex Nuevo Mercado retrocedía un 5,31%. También en Europa, las Bolsas, arrastrada por los valores tecnológicos, bajaba significativamente, influidas especialmente por las subidas de los tipos de interés en Estados Unidos.

Sólo Terra se salvo de la quema. La cotización de la filial de Telefónica para Internet subió ayer un 2,21 por ciento, situándose en 50,80 euros (8.452 pesetas) y frenando así su caída desde que el pasado lunes anunció la compra del portal norteamericano Lycos por 2,3 billones de pesetas. Terra acumuló la pasada semana una caída del 23,42 por ciento, alcanzando el viernes su precio más bajo en lo que va de año, con 49,70 euros (8.269 pesetas). La capitalización bursátil de la compañía cayó en más de 708.137 millones desde el pasado lunes, debido a que los mercados han consideraron alto el precio que Terra pagará por Lycos.

La mala situación generalizada de los valores tecnológicos y las compañías de telecomunicaciones se debe, según los expertos, a los altos precios que éstas han de pagar por hacerse con las licencias de móviles UMTS, especialmente en quellos países que, como en Reino Unido, los sistemas de adjudicación se basan en el sistema de subastas. Los elevados desembolsos que suponen están poniendo en duda la viabilidad y rentabilidad de los nuevos servicios.



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