El Gobierno obligará a los fabricantes de móviles a etiquetarlos en función de su emisión electromagnética
Los ministerios de Sanidad y Consumo y Ciencia y Teconología obligarán a los fabricantes de telefonía móvil a etiquetar sus productos "de forma clara y sencilla" en función de sus potencias de emisión electromagnética, atendiendo a las recomendaciones de un equipo multidisciplinar de expertos presentadas el viernes por el departamento que dirige Celia Villalobos.
En concreto, la directora general de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, Dolores Flores, afirmó que estas recomendaciones se introducirán en un real decreto que elaborarán los ministerios citados con el fin de adaptar la normativa española a las recomendaciones de la Unión Europea relativas a las medidas de protección del consumidor frente a los campos electromagnéticos.
Según explicaron los expertos, las compañías de telefonía Nokia, Ericsson y Motorola serán las primeras que adoptarán sus recomendaciones incluyendo, a partir del próximo mes de junio, las emisiones electromagnéticas en la pantalla del teléfono. El comité de expertos recomienda además actualizar los procedimientos de solicitud, autorización, instalación e inspección de antenas de telefonía, "con el fin de que los ciudadanos estén convenientemente informados", así como garantizar el cumplimiento de la recomendación europea en las instalaciones de estaciones base en espacios sensibles, como centros educativos y de salud, hospitales y parques públicos, evitando que el haz de emisión directa de estas antenas afecte o se dirija a dichas zonas.
No obstante, el estudio realizado por este comité de expertos ha concluido que, a los valores actuales de potencia de emisión (de 0 herzios a 300 gigaherzios) las antenas y los teléfonos móviles "no representan un peligro para la salud pública". A este respecto, el subdirector general de Sanidad Ambiental de Sanidad, Francisco Vargas, (responsable del informe) aseguró que las instalaciones inspeccionadas en España cumplen con estos criterios. A pesar de esto, los expertos consideran la necesidad de promover un uso racional de los teléfonos móviles, particulamente en niños, adolescentes o portadores de implantes activos, como marcapasos.
"Con esta recomendación sólo pretendemos elevar el principo de precaución al máximo para este tipo de poblaciones, pero tampoco se ha demostrado que las emisiones tengan sobre ellas un efecto nocivo", valoró al respecto el epidemiólogo Manolis Kogevinas. Por ello, al margen de los datos obtenidos y atendiendo al progresivo avance científico y técnico, este comite cree necesario seguir fomentando la investigación clínica, experimental y epidemiológica sobre los efectos de la exposición a los campos electromagnéticos provenientes de cualquier fuente emisora.
(EP)
