Cable and Wireless reestructurará su negocio internacional
Cable and Wireless ha decidido reestructurar su división de servicios de datos internacionales, C&W Global. Esta reestructuración, que supondrá un enfoque exclusivo en grandes empresas multinacionales en Europa y Estados Unidos, con el consiguiente abandono del mercado de consumo, traerá consigo la eliminación de 3.500 empleos.
El objetivo de esta reorganización no es otro que lograr ahorrar alrededor de 635 millones de dólares anuales en costes operativos. El plan será llevado a cabo durante un período de doce meses y reducirá la plantilla de la operadora C&W Global de los 12.000 empleados con que cuenta en la actualidad a 9.000. “Todavía no estamos en condiciones de poder hacer un desglose de cómo se concretarán esta reducción, pero afectará sobre todo a Estados Unidos, donde se encuentra la mayoría de nuestras operaciones, y, aunque con una intensidad, a Europa continental ”, ha declarado Peter Eustace, portavoz de C&W.
Este anuncio coincide con el de los resultados de la empresa durante los primeros seis meses del año en curso, en línea con su última revisión de expectativas cuando en septiembre advirtió que los ingresos de C&W Global, a excepción de las ventas de capacidad de red, caerían alrededor de un 6%, frente al incremento de entre un cero y un 10% previsto con anterioridad.
El lunes pasado comenzaron a circular rumores sobre un recorte sustancial de empleos en la compañía, llegándose incluso a especular acerca de la posibilidad de que cerrara completamente las oficinas de C&W Global en Estados Unidos, donde ofrece servicios de hosting Web y de telecomunicaciones para empresas.
Aunque C&W había llegado a considerar seriamente esta alternativa, así como el cese completo de su negocio en Europa continental, finalmente ha optado por mantener su presencia pero limitando completamente su actividad al segmento de empresas multinacionales y proveedores de servicios. Además, el grupo ha decidido reducir el número de sus centros de datos globales de 42 a 23 con el objetivo de convertirlos en un negocio rentable.
C&W prevé un aumento de la presión a la baja en los precios del mercado de tránsito IP y el mantenimiento de la volatilidad de la demanda proveniente del segmento de los operadores. Sin embargo un rayo de luz ha conseguido filtrarse entre los tormentosos nubarrones que configuran su situación económica: los ingresos generados por los clientes empresariales aumentaron un 12% durante los últimos doce meses.
Este incremento se ha producido principalmente en su negocio empresarial de servicios IP dentro del Reino Unido, mientras que las ventas en Japón y Estados Unidos simplemente se mantienen, y en Europa continental han caído ligeramente.
En septiembre, un análisis sobre el mercado de servicios IP de la consultora Cap Gemini Ernst & Young y de la división de investigación de la londinense Dresdner Bank, vaticinaba que las ventas de servicios IP en Europa Occidental crecerían sensiblemente por debajo de lo previsto y que tan sólo aumentarían de forma moderada durante los próximos dos años. En concreto, el estudio concluía que el volumen de este mercado pasaría de los 14.000 millones de dólares que representa en la actualidad a situarse en unos 17.500 millones de dólares en ese período. Un crecimiento mucho menor del necesario para aliviar, mediante el suficiente retorno de la inversión, la delicada situación que atraviesan las operadoras dadas las grandes inversiones de capital que han realizado en tecnología e infraestructuras.
Este anuncio coincide con el de los resultados de la empresa durante los primeros seis meses del año en curso, en línea con su última revisión de expectativas cuando en septiembre advirtió que los ingresos de C&W Global, a excepción de las ventas de capacidad de red, caerían alrededor de un 6%, frente al incremento de entre un cero y un 10% previsto con anterioridad.
El lunes pasado comenzaron a circular rumores sobre un recorte sustancial de empleos en la compañía, llegándose incluso a especular acerca de la posibilidad de que cerrara completamente las oficinas de C&W Global en Estados Unidos, donde ofrece servicios de hosting Web y de telecomunicaciones para empresas.
Aunque C&W había llegado a considerar seriamente esta alternativa, así como el cese completo de su negocio en Europa continental, finalmente ha optado por mantener su presencia pero limitando completamente su actividad al segmento de empresas multinacionales y proveedores de servicios. Además, el grupo ha decidido reducir el número de sus centros de datos globales de 42 a 23 con el objetivo de convertirlos en un negocio rentable.
C&W prevé un aumento de la presión a la baja en los precios del mercado de tránsito IP y el mantenimiento de la volatilidad de la demanda proveniente del segmento de los operadores. Sin embargo un rayo de luz ha conseguido filtrarse entre los tormentosos nubarrones que configuran su situación económica: los ingresos generados por los clientes empresariales aumentaron un 12% durante los últimos doce meses.
Este incremento se ha producido principalmente en su negocio empresarial de servicios IP dentro del Reino Unido, mientras que las ventas en Japón y Estados Unidos simplemente se mantienen, y en Europa continental han caído ligeramente.
En septiembre, un análisis sobre el mercado de servicios IP de la consultora Cap Gemini Ernst & Young y de la división de investigación de la londinense Dresdner Bank, vaticinaba que las ventas de servicios IP en Europa Occidental crecerían sensiblemente por debajo de lo previsto y que tan sólo aumentarían de forma moderada durante los próximos dos años. En concreto, el estudio concluía que el volumen de este mercado pasaría de los 14.000 millones de dólares que representa en la actualidad a situarse en unos 17.500 millones de dólares en ese período. Un crecimiento mucho menor del necesario para aliviar, mediante el suficiente retorno de la inversión, la delicada situación que atraviesan las operadoras dadas las grandes inversiones de capital que han realizado en tecnología e infraestructuras.
