Bruselas da un ultimátum a España para aplicar las nuevas directivas de telecomunicaciones
La Comisión Europea dio ayer un ultimátum a España y a otros 15 estados miembros de la UE para que en el plazo de dos meses implementen en sus legislaciones nacionales las nuevas directivas sobre telecomunicaciones. En caso contrario, Bruselas podría llevar el caso al Tribunal de Justicia.
El plazo límite para que los estados incluyeran en sus normativas sobre telecomunicaciones la nueva regulación de la UE sobre el sector, que incluye la directiva sobre Derechos de los Ciudadanos, finalizó el 25 de mayo, pero sólo siete países (Dinamarca, Estonia, Finlandia, Irlanda, Malta, suecia y Reino Unido) lo cumplieron. Desde entonces otros cuatro países ya la han implementado, además de Austria, donde todavía está pendiente de confirmación.
Junto con España, los países que todavían no han adaptado a sus legislaciones nacionales las nuevas directivas son Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chequia, Chipre, Eslovenia, Francia, Grecia, Hungría, Italia, los Países Bajos, Polonia, Portugal y Rumanía.
Las nuevas reglas comunitarias sobre telecomunicaciones suponen, entre otras medias, el reforzamiento de la protección de los usuarios. En concreto, recogen el derecho a cambiar de operador conservando el número en sólo un día, y el derecho a ser informado de las técnicas de gestión de tráfico utilizadas por los proveedores de servicios y a no almacenar información de los dispositivos del usuario (como las cookies) sin consentimiento del interesado.
Junto con España, los países que todavían no han adaptado a sus legislaciones nacionales las nuevas directivas son Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chequia, Chipre, Eslovenia, Francia, Grecia, Hungría, Italia, los Países Bajos, Polonia, Portugal y Rumanía.
Las nuevas reglas comunitarias sobre telecomunicaciones suponen, entre otras medias, el reforzamiento de la protección de los usuarios. En concreto, recogen el derecho a cambiar de operador conservando el número en sólo un día, y el derecho a ser informado de las técnicas de gestión de tráfico utilizadas por los proveedores de servicios y a no almacenar información de los dispositivos del usuario (como las cookies) sin consentimiento del interesado.
